Nahir dijo que el crimen de Pastorizzo «fue un accidente»: Declaración completa

El juicio por el crimen que conmovió a Gualeguaychú tuvo la voz de la única acusada. Nahir Galarza declaró por más de una hora y dijo que el chico era adicto, violento y que la acosaba. Detalló su versión sobre la noche de la muerte.

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Frente a los jueces, Nahir Galarza describió cómo era el vínculo que la unía a Fernando Pastorizzo. Según la joven, no era una relación: «Sólo nos veíamos de madrugada para tener sexo», aseguró.
La chica insistió en trazar el perfil de Pastorizzo que siempre planteó su defensa: que el muchacho era adicto, violento y que la acosaba. Según Nahir, «Fernando se drogaba».

El Tribunal miraba fijamente a la joven, que declaró por más de una hora. Nahir lloraba. La Defensa pidió interrumpir la declaración, pero Nahir Galarza se negó: «Quiero contarlo. Lo que pasa es que me ha costado mucho pensar en todo de nuevo, había tratado de evitar pensar en este día. Por eso me cuesta».
A continuación, el testimonio completo de Nahir con su versión de los hechos sobre el día que Fernando Pastorizzo fue asesinado.

«El día del hecho, yo me había levantado a la mañana. Mi mamá me había despertado como siempre, íbamos al gimnasio juntas. Ese día fuimos más temprano porque queríamos ir a las termas. Mientras mi mamá se bañaba cargué el celular con su cargador. Después buscamos a mi tía en su casa y después fuimos a las termas. Casi no use el celular ese día. No me hablaba hace dias con Fernando por lo que pasó en Navidad», comenzó a contar sobre aquel fatídico día.

La noche de la muerte

«Volvimos de noche. Yo no tenía mi cargador, estaba en la casa de Fernando. Me bañe y comí, después me fui a mi habitación. No me acuerdo quien de los dos llamó. Me cambié para ir a la casa de él a buscar el cargador. Me fui al Casino a tomar un remis. Fui hasta la casa de él, me bajé en la esquina. Golpeó la puerta y sale él, gritándome porque no le atendía el teléfono. Que siempre le hacía lo mismo, que era una enferma. Le dije que quería mi cargador, que ya me iba. Me insistió que entrara a su casa. Le dije que no, me quedé en la vereda para que no me forzara a entrar», aseguró.

«A los minutos vuelve a salir gritando que si lo estaba cargando porque no lo atendía, le dije que mi celular estaba en casa sin batería, me dijo que me llevaba a mi casa. No hablamos nada, no cruzamos palabra. Cuando llegamos a casa me preguntó si podía entrar porque quería hablar bien conmigo. Lo vi más tranquilo entonces le dije que estaba bien, entró la moto al negocio. Después subimos. Yo no le contaba a mis papás cuando él iba a casa, era siempre de madrugada y ellos no se daban cuenta por los ruidos que hay en casa en verano», dijo en referencia a los boliches de la zona.

Fernando tomó el arma

«Cuando cruzamos por la cocina para ir a mi habitación, el agarró el arma de mi papá que estaba arriba de la heladera. No sé qué hora era. Cuando la agarró empezó a moverla para todos lados, empezó a joderme. Me molestó lo que estaba haciendo, me di vuelta y me fui a mi habitación. El entró sin el arma, pensé que la había dejado en la cocina. Yo estaba enojada y el me abrazaba y me pedía perdón, me decía que no me aguantaba una joda. Me calme porque no lo había hecho antes, hablamos otros temas», agregó.

«Me convenció de tener relaciones, yo no quería porque supuestamente íbamos a hablar nada más. Y otra vez empezó a reprocharme cosas, que estaba con otros, que era mi culpa que mi amiga le había pegado en Navidad, me decía cosas por el chico con el que me vio, era un conjunto de cosas, se acordaba de más y me seguía insultando. Me dio impotencia. Le dije que se fuera de mi casa, Que no quería hablar más. Me acerqué a la puerta, él me decía que era mi culpa de que él se pusiera así, siempre me echaba la culpa de todo. Me abrazó y yo lo saqué. Me pedía perdón, me decía que no lo iba a hacer más y siempre lo volvía a hacer. Que yo la cortara, que yo hacía problemas», dijo.

La violenta charla

«Para que se fuera le conté de Rafael (Estefano) que me veía hace mucho tiempo con él. Que no era como con la mayoría con los que ni hablaba y con los que me veía un par de veces. Con Rafa era distinto. Le eché en cara que ese chico me trataba mejor que él y que no pensaba dejar de verme con nadie por él. Se enojó obviamente, me agarró del pelo, me insultaba (llora) y yo le seguía diciendo lo mismo. En un momento él me dice una palabra que me afectaba un montón que me dijera. La palabra era depresiva. Yo le había contado que a la noche llegaba a casa y me largaba a llorar, le dije para que se diera cuenta que me estaba haciendo mal. A partir de ese día lo empezó a usar en mi contra, me decía depresiva. Cuando me dijo eso -aquella madrugada- me largué a llorar. Fernando me echaba la culpa de que si yo estaba así era mi culpa, que si el me trataba así era mi culpa porque él se enojaba por mi culpa», dijo en medio del llanto que sostuvo a lo largo de su declaración.

«Le dije que no me iba a dejar de ver con nadie, que estaba con alguien que me trataba mejor. Se enojó, Me agarró del pelo de nuevo. Me sacó de la habitación y me empezó a decir que no vuelva a decirle eso, que me iba a ir con él. Pasamos por la cocina de nuevo para salir, Fernando agarró el arma de nuevo y (llora) y me apuntó en la panza y me dijo que me iba a ir a vivir con él. No me esperaba que hiciera eso. Realmente me sorprendió. Me dijo que si intentaba hacer algo iba a matar a alguien, me decía todo el tiempo que me callara porque yo estaba llorando. Él tenía razón, si yo despertaba a alguien el primero iba a ser mi papá, lo conozco a mi papá y quise evitar la situación. Bajamos por la escalera, él no me había soltado, Me tenía agarrada del pelo. Cuando llegamos al patio me abrazo como si nada. Me entraron los nervios, no entendía que pasaba. Él me dijo que si yo quería que se calme que hiciera lo que él quería. Yo le decía que se calmara. Le dije que me devolviera el arma que era de mi papá. Pero cuando se enojaba se cegaba, no me escuchaba», sostuvo.

La amenaza con el arma

«Agarró la punta del arma, la hizo para abajo, Me dijo que me iba a ir con él. No sé cómo explicar la situación, yo estaba nerviosa. Cuando fui a abrir la puerta me dijo que no intentará hacer nada, que no vaya a correr ni nada. Él tenía el arma: ¿qué podía yo hacer? Me dijo que esperara adentro, el sacó la moto, y yo miré si había alguien y vi a Joaquín Osorio discutiendo con su novia. Yo a él lo conocía desde que tenía 15, desde esa época me veía también con Joaquín», contó. Continuar leyendo

La Cámara de Diputados tumbó la ley que permite el uso de Agroquímicos.

Con una bandera de varios metros con la leyenda “Paremos este Auschwitz a cielo abierto” y un importante marco de presencia de organizaciones ambientalistas y el MST se debatió en la Cámara de Diputados un proyecto que regula (es decir, que permite) la utilización de agrotóxicos en la provincia. El proyecto de ley venía con media sanción del Senado con el apoyo del oficialismo y la oposición. Continuar leyendo