El Apache se mostró conforme con la victoria de Boca sobre Guaraní Antonio Franco y reconoció que intenta abstraerse del fenómeno que genera en los hinchas. «Lo importante es lo que yo haga adentro de la cancha, con mis compañeros», dijo.
Carlos Tevez volvió a ser una de las figuras de la cancha en el duelo que clasificó a Boca para los cuartos de final de la Copa Argentina. El ex-Juventus analizó el triunfo de su equipo frente a un modesto Guaraní Antonio Franco, que no opuso demasiada resistencia: «Ellos estaban bien parados en los primeros minutos atrás y nos costó abrir el partido, pero una vez que lo hicimos se nos hizo un poco más fácil».
«Lo tomamos en serio porque no podemos regalar un partido así. Como bien dijo el Vasco, teníamos mucho más para perder que para ganar, pero por suerte sacamos un buen resultado», agregó Carlitos.
A su vez, se refirió a su presente futbolístico y lo que significó su retorno a la Argentina: «Ya pasó la adaptación. Me cuesta un poco porque para mí esto es fin de temporada y tenía que tener vacaciones, pero lo disfruto mucho y la verdad que estoy feliz».
En San Juan o en cualquier provincia o ciudad, los hinchas xeneizes se desviven por un autógrafo o un saludo de su ídolo, pero el Apache intenta mantenerse al margen de la locura que provoca: «Lo importante es lo que yo haga adentro de la cancha, con mis compañeros, y la alegría a la gente se la tengo que dar adentro de la cancha. Lo que pasa afuera para mí es normal».
«Desde mañana pensaremos en Godoy Cruz y en preparar ese partido», concluyó Tevez, que quiere volver a llevar a Boca a lo más alto.
