Un individuo llamado Danielito y su cómplice recorrieron las calles con total violencia y luego de algunos minutos uno de ellos fue aprehendido por el personal de la Jefatura Departamental de Gualeguay.
La Policía de Entre Ríos, a través de la Jefatura Departamental Gualeguay informó a la comunidad que en horas de la tarde de este domingo se tomó conocimiento en la sección asuntos judiciales a través de la denuncia de Jesús, que en circunstancias de estar este junto a su padre “zucu”, charlando al frente de su negocio, se les acercaron dos masculinos en motocicleta a quienes reconoció y con los cuales luego de mantener una discusión por problemas de vieja data, comenzaron una violenta agresión arremetiendo con el rodado sobre zucu, quien debió ser asistido en el Hospital San Antonio, donde se pudo determinar que había sufrido la fractura de su pierna izquierda debido al fuerte impacto además de otras lesiones al igual que se hijo.
Con el personal puesto en alerta y la autoridad judicial en conocimiento se dio inicio a toda una serie de diligencias necesarias para recolectar las pruebas y dar con los responsables de este hecho.
Pero habían pasado solo dos horas, cuando en la sala de comunicaciones suena el teléfono de emergencias alertando que en un comercio ubicado en Urquiza a la altura del 900, Miguelina (71), había sido víctima de un ilícito, al llegar el Oficial Villalba al lugar es advertido sobre dos masculinos que luego de haber observado la situación, comenzaron a exigirle dinero en forma violenta, manifestando un total desprecio por el otro con sus cobardes actitudes, para luego de sentirse satisfechos en su fechoría retirarse en una motocicleta, con el dinero de la caja comercial, surgiendo hasta ese momento por la información colectada que se trataría de los mismos malvivientes denunciados antes por Jesús.
El personal de calle se mantenía alerta y llevando a cabo un importante operativo cerrojo cuando a los pocos minutos se toma conocimiento de otro ilícito con similares características en el kiosco de Héctor (73), en calle Alarcón Muñiz, uno de estos masculinos haciéndose pasar por cliente sorprende de igual manera que a su anterior victima a Amanda (70), para luego de apoderarse de una suma de dinero -dólares y pesos-, y otros elementos como tarjetas de teléfono sale huyendo junto a su cómplice que también había ingresado al lugar, al advertir que los vecinos se habrían dado cuenta de que algo sucedía en el tranquilo barrio, y podrían haber dado aviso a la policía.
Rápidamente el personal de calle fue agudizando la recorrida, teniendo en cuenta que al ser quienes están horas y días enteros cuidando la ciudad logran manejar el movimiento y modus operandi de los siempre conocidos raterillos locales, así fue que el móvil J.P. N° 564, a cargo de los suboficiales Miranda y Luna, recorriendo el tercer cuartel alcanzan a divisar a la altura de Ezeyza y Alberdi, un moto vehículo que circulaba a gran velocidad con dos ocupantes cuyas características eran muy similares a las descriptas en los ilícitos, siendo reconocidos de inmediato, ya que ambos cuentan con gran cantidad de ingresos debido a sus reiteradas conductas antisociales.
Los masculinos al percatarse de la presencia policial, hacen una maniobra desafortunada, perdiendo el control del rodado y derrapando en el suelo, pero lejos de detenerse emprenden su huida a pie, con la velocidad que da la adrenalina, descartándose de cuanto podían a su paso, no obstante uno de ellos logra ser alcanzado a los pocos metros por el Jefe de calle Oficial Villalba junto a su co equiper la suboficial Kapp, donde luego de realizadas las diligencias necesarias ordenadas por el Dr. Telenta Agente Fiscal en turno, entre las cuales se llevo a cabo el secuestro de la motocicleta y diversos elementos de vital importancia probatoria para la causa, entre los cuales estaban gran parte de los efectos sustraídos, procedieron con el traslado de Danielito a esta dependencia donde quedo alojado a disposición de la causa investigada y no obstante no haberse logrado la detención de su cómplice está claramente identificado.
