El juez federal de Esquel Guido Otranto ordenó que se realicen dos procedimientos judiciales: uno en la sede de la Administración nacional de Aviación Civil (ANAC) y otro en la empresa Baires Fly. Los procedimientos fueron ordenados en la causa en la que se investiga si Marcelo Tinelli violó las disposiciones vigentes durante la cuarentena obligatoria para hacerse llevar en avión una valija hasta la ciudad patagónica donde pasa el aislamiento por la pandemia de coronavirus.
Según pudo confirmar Infobae en fuentes judiciales, Otranto firmó dos órdenes de presentación para que tanto ANAC como la empresa de taxis aéreos que llevó la valija a Esquel, entreguen la documentación relacionada con el vuelo.
La orden de presentación es un trámite judicial que se puede explicar como una instancia previa a un allanamiento. Eso implica que el juez le pide documentación al organismo o a la empresa y se debe aportar sin la necesidad de que las fuerzas de seguridad requisen las oficinas.
El caso comenzó luego de que el viernes pasado llegara un taxi aéreo al aeropuerto internacional esquelense Brigadier General Antonio Parodi con una valija que fue retirada por un empleado de Tinelli. Eso motivó que el jefe del aeropuerto Luis Alberto Cavero realizara la denuncia correspondiente a las autoridades de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
El caso quedó encuadrado en una de las figuras penales que se aplican a los que violan las restricciones de la cuarentena según establecieron los decretos de Necesidad y Urgencia firmados por el presidente Alberto Fernández para evitar la propagación del coronavirus. En la investigación sobre la valija de Tinelli se aplica el artículo 205 del Código Penal que establece que: “Será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”.
El exhorto enviado por Otranto recayó en el juzgado federal 12 de la Capital que está de turno con las fuerzas de seguridad. Ese juzgado está a cargo de Rodolfo Canicoba Corral quien luego de darle vista al fiscal Guillermo Marijuán ordenó que se hicieran los dos procedimientos. Las órdenes de presentación fueron encargadas a la División Delitos Federales de la Policía Federal.
Según pudo confirmar Infobae a través de fuentes judiciales, Otranto le pidió a la ANAC las constancias de la autorización del vuelo de la empresa Baires Fly; si el vuelo estaba contemplado en alguna de las excepciones normativas vigentes, y en el caso de que fuera así, todas las constancias que lo acrediten.
La otra orden de presentación dirigida a Baires Fly pedía toda la información referida el alquiler del taxi aéreo: quién lo contrató, con qué fin, y la nómina completa de la tripulación y los pasajeros.
Cuando se conoció el aterrizaje del vuelo en el aeropuerto patagónico, Tinelli señaló: “Nosotros lo único que hicimos es seguir un tratamiento médico. No teníamos los medicamentos, los pedimos a Buenos Aires y pagamos un taxi aéreo hasta Esquel”. Explicó que eran medicamentos para él y para una de sus hijas, Candelaria, quien pasa la cuarentena en la estancia familiar en Esquel. Sin revelar detalles sobre los tratamientos de salud, Tinelli aclaró que necesita un medicamento que lo buscó tres veces en Esquel y no lo consiguió. «Es algo normal. Lo tengo y no consigo la medicación acá. Y Cande continúa un tratamiento de salud que tiene hace años. Es algo privado”, había dicho cuando se le pregunto el motivo. “Es un traslado de medicamento a una ciudad autorizada. Puedo mostrar los papeles de la empresa del taxi aéreo en donde figura ‘traslado de medicamentos para pasajeros en la ciudad de Esquel’. Nada más”, había dicho el empresario consultado al respecto por Luis Novaresio en radio La Red.
En el mismo sentido hizo declaraciones Luis Grande, dueño de Baires Fly, la empresa que realizó el vuelo que está bajo investigación judicial. Uno de los principales empresarios del sector de taxis aéreos respaldó lo argumentado por Tinelli: dijo que el empresario televisivo le pidió que tramitara ante la ANAC un permiso para que el avión le llevara medicamentos hasta Esquel. También aseguró que el error fue catalogarlo como “vuelo humanitario” cuando se gestionó el permiso ante la ANAC.
El caso judicial-uno de los cientos abiertos por violación a la cuarentena-está en la etapa inicial. La documentación pedido por exhorto puede llegar a explicar si se cumplieron los requisitos para autorizar el vuelo ya que la actividad aérea está restringida y limitada a cuestiones sanitarias por la pandemia de coronavirus.