La Federación Agraria de Entre Ríos advirtió la necesidad de adoptar medidas de emergencia, que ayuden a la salida de miles de cabezas de ganado que se encuentran en la zona de Islas del río Paraná, como también del departamento Islas del Ibicuy que debe soportar la confluencia de las crecidas del río Uruguay, además.
La Entidad se ha comunicado con las autoridades del Gobierno Provincial y la Secretaría de Agricultura de la Nación, con el fin de convocar con urgencia a un comité de crisis, con todos los organismos oficiales involucrados, como del sector privado, que pueden aportar para darle una rápida salida a las miles de cabezas que hoy se encuentran afectadas.
“No todos los ganaderos están en las mismas condiciones. Damos pronósticos concretos para Diamante, Victoria y Paraná, así cada ganadero puede tomar sus propias decisiones, asumiendo sus propios riesgos. Estamos frente a una inundación acotada. No hablamos de inundación de zonas de islas y bajas, pero este evento Niño es largo, no debería sorprender que en marzo o principios de abril tengamos en la región una condición de aguas más altas que condicione la actividad ganadera”, dijo a Uno el hidrólogo Juan Borús, quien habló sobre el comportamiento del río Paraná en los próximos días, la creciente del Uruguay, cultivos y traslado de animales de islas.
Las lluvias en las altas cuencas, las imágenes del fin de semana de las Cataratas del Iguazú cerradas al público, el anuncio de la apertura de compuertas de la represa Itaipú este miércoles por la madrugada y la situación de la costa del Uruguay, con más de 400 familias evacuadas en Concordia y una tendencia del caudal de agua en alza, la inquietud general es saber qué sucederá con la conducta del río Paraná en los próximos días.
Borús, es subgerente de Sistemas de Información y Alerta Hidrológico del Instituto Nacional del Agua (INA). Habló sobre el pico de crecida, que será el próximo 14 de noviembre, y que no alcanzará niveles de alerta, también habló sobre las perspectivas para los cultivos entrerrianos y también confirmó si será necesario el traslado de animales de las zonas bajas de islas a sectores más altos.
El hidrólogo también hizo mención a la costa del Uruguay. “Las lluvias se disiparon. Se están viendo los efectos de un caudal sostenido y persistente desde la alta cuenta, lentamente van a ir retornando a sus valores normales. En todo el tramo correntino y brasileño el río tiene una tendencia descendente pero todavía por los niveles normales de evacuación. Lo mismo ocurre con el tramo inferior, cuyo impacto está atenuado por el trabajo de la represa Salto Grande que está minimizando el impacto. Pero la condición del río Uruguay es retomar a la normalidad en forma muy lenta y gradual, y no se espera, en el corto plazo, que la situación se normalice», explicó.