Jóvenes y alcohol: el consumo en exceso también produce hipertensión

Un estudio de la Universidad de Montreal determinó que el abuso de bebidas alcohólicas entre los 18 y los 24 años provoca un mayor nivel de presión arterial. 1 de cada 4 toma en exceso

alcohol

Consumir una bebida con alcohol de manera ocasional no representa un gran peligro. Sin embargo, hacerlo de manera frecuente es toda una amenaza para salud, sobre todo en los jóvenes, ya que ahora también es una de las posibles consecuencias de la presión arterial alta.

Los ‘jóvenes adultos’ de veinte años que abusan regularmente del alcohol tienen una presión arterial mucho más alta que los demás y, por ende, aumentan los riesgos de desarrollar hipertensión, según confirmó un estudio llevado a cabo por investigadores de laUniversidad de Montreal.

El consumo excesivo de alcohol, es decir, el consumo de cinco o más bebidas alcohólicas en menos de dos horas, es bastante frecuente: estudios previos en Canadá y Estados Unidos han demostrado que aproximadamente cuatro de cada diez adultos jóvenes de entre 18 y 24 años son bebedores frecuentes.

Ahora, los investigadores demostraron que el consumo excesivo de alcohol puede tener un efecto sobre la presión arterial en ese grupo etario, aumentando el riesgo de desarrollar hipertensión y enfermedades crónicas relacionadas. «Encontramos que la presión arterial de los jóvenes adultos de 20 a 24 años que abusan del alcohol era de 2 a 4 mm de mercurio más alto que aquellos que ‘no son bebedores'», dijo Jennifer O’Loughlin, autora principal del estudio publicado en el Journal of Adolescent Health.

Para estudiar el consumo de alcohol ‘a los 20’, se tomaron estudios de 1294 jóvenes de diversos orígenes sociales en Montreal, Canadá desde 1999. Los datos se recogieron de nuevo a los 24 años, momento en el cual se les tomó la presión a los participantes.

Las medidas de presión arterial sistólica, la presión que tienen las arterias cuando el corazón late (es decir, cuando se contrae el músculo), debe estar por debajo de los 140 milímetros de mercurio. Por encima de ese valor, más de 140 sobre 90, se considera presión arterial alta.

El segundo número, la presión arterial diastólica, mide la presión en las arterias entre los latidos del corazón (es decir, cuando el músculo está en reposo entre los latidos y se vuelve a llenar con sangre).

«Esto quiere decir una presión arterial sistólica entre 120 y 139 milímetros de mercurio. Esto es preocupante porque esta condición puede derivar en hipertensión, otras enfermedades del corazón y muerte prematura«, aseguró O’Loughlin, quien además es profesora en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Montreal.

La experta, pidió además a los profesionales de la salud que adopten este nuevo enfoque a modo preventivo: «Ya sabemos que la mala alimentación, el consumo de sal, y la obesidad son factores predictivos de presión arterial alta, y que hay un vínculo entre la presión arterial alta y el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas. Sin embargo, ahora los médicos deberán preguntar a los jóvenes qué consumo de alcohol tienen ya que un aumento leve en su presión puede ser una señal de advertencia importante».

El estudio también reveló que el 85% de los jóvenes adultos que beben en exceso a los 20, mantienen este comportamiento también a los 24 años.

Una de las inquietudes que dejan pendiente los expertos es si estos parámetros negativos podrán desaparecer sólo disminuyendo el consumo de alcohol.

Fuente: Infobae

Comentarios