La ministra de Salud de Santa Fe señaló que en dicha provincia también hay personas internadas en terapia intensiva por factores de riesgo graves. «Estamos en el pico de consultas por problemas respiratorios», dijo.
Las autoridades sanitarias de Santa Fe confirmaron ayer que dos personas murieron por gripe en esa provincia. Son los dos primeros casos mortales que se conocen este año.
Andrea Uboldi, ministra de Salud santafecina, informó que eran pacientes del sur provincial que estaban dentro de los grupos de riesgo, pero que no habían recibido la vacuna antigripal estacional recomendada para prevenir complicaciones graves.
En el país hay unos 9 millones de argentinos que, por su edad o condición, son más vulnerables a las complicaciones de la gripe, como la neumonía o el agravamiento de una enfermedad crónica, si la contraen. Son los mayores de 65 años, las embarazadas en cualquier trimestre de la gestación y hasta diez días después del parto si no la hubiesen recibido antes, los chicos de entre seis y 24 meses de edad, y las personas de entre 2 y 64 años con enfermedad cardiovascular, pulmonar o renal crónicas, diabetes, obesidad, inmunosuprimidos, entre otras. Para ellos, la vacuna es gratuita.
«Tenemos personas internadas en terapia intensiva por factores de riesgo graves y dos fallecidos en la provincia», sostuvo Uboldi. «Estamos en el pico de consultas en las guardias por problemas respiratorios», indicó. En la provincia, aún hay un 50% de la población de riesgo sin vacunar. Hasta ayer, se habían aplicado 295.377 dosis o apenas un 49,5% de cobertura.
La Secretaría de Salud de la Nación difundió el fin de semana una alerta ante un aumento esperado de los casos de gripe para la época. Aconsejan tomar medidas en los hospitales, las escuelas y los lugares de trabajo para prevenir más contagios. Hay dos cepas del virus de la influenza tipo A que están cocirculando actualmente: los subtipos H1N1 (55% de los casos) y H3N2 (41%).
En los hospitales, los pacientes con cuadros respiratorios con fiebre deben permanecer en «lugares definidos de la sala de espera». Las medidas preventivas son lavarse las manos, cubrirse la boca con el pliegue interno del codo al toser o estornudar, airear los ambientes cerrados y no automedicarse ni usar aspirina. «Las personas con síntomas [fiebre de más de 38°, decaimiento general, tos, dolor de garganta y muscular]deben permanecer en sus domicilios sin ir al trabajo [o la escuela]por siete días, o hasta la remisión completa de los síntomas», se indicó.