Tras el encuentro de los apoderados de ambas listas, junto a la jueza que suspendió las elecciones, finalmente no hubo acuerdo de las partes para realizar los comicios en Boca. La CD actual realizó una denuncia por falsificación de firmas.
Las elecciones que estaban programadas para el próximo domingo en Boca Juniors fueron suspendidas por la justicia, tras una cuestionada intervención solicitada por la lista opositora. Este jueves, tras una propuesta del oficialismo, se realizó una mediación ante el juzgado civil N° 11 de la Capital Federal, por falta de acuerdo entre las partes, los comicios quedaron postergados y se realizarían en el mes de marzo.
Luego de una conciliación de tres horas en el juzgado civil N° 11 de la Capital Federal, de la que participaron los apoderados del oficialismo y la oposición de Boca Juniors, las partes no llegaron a un acuerdo y las elecciones que estaban pactadas para este domingo 3 de diciembre en la Bombonera, por el momento, quedaron suspendidas.
Sin fecha estimada aún para los comicios, Jorge Ameal podría continuar como presidente del club de la Ribera hasta que se dispongan nuevos comicios.
Por parte del oficialismo asistieron a la audiencia convocada por el Juzgado Civil 11 Ricardo Rosica, secretario del club; y Walter Krieger, asesor legal de Boca, mientras que por la oposición se hicieron presentes Javier Medín, representante legal; y Sebastián Silvestri.
La audiencia de conciliación comenzó pasado el mediodía y cerca de las 16 se determinó que se buscará una nueva fecha electoral frente al desacuerdo total de ambas partes.
«Hubo momentos muy calientes, con acusaciones fuertes de los dos lados», dijeron a Télam testigos de la reunión.
El oficialismo propuso votar, que una porción de los 13.500 socios observados lo hicieran en una urna apartada y que, con el resultado puesto, se constatara si habían sido mal inscriptos para proceder a la anulación. La oposición propuso que cada parte sea interpelada por un perito y que la Justicia añadiera al suyo para llevar a cabo la limpieza del padrón. Pasadas casi tres horas de mitin, pasaron a un cuarto intermedio y finalmente no existió el trato y las partes firmaron las actas.
El oficialismo llegó a las 12, representado por el actual secretario general y miembro de la Junta Electoral Ricardo Rosica, y Walter Krieger, quien acompañó a Riquelme en su última conferencia de prensa, aceptó que 3.660 socios podrían entrar dentro de las irregularidades que denuncian sus rivales políticos, y propusieron que votaran en una urna aparte.
La oposición arribó al mitín a las 12.30, con Javier Medin (hombre de confianza de Macri y candidato a vocal de la lista de Ibarra) y Sebastián Silvestri (miembro de la Junta Electoral durante los ocho años de gestión de Angelici) a la cabeza, concluyeron que en realidad eran 5.780 los socios “irregulares”. El oficialismo instó a que entonces esos asociados sufragaran de forma separada, pero la oposición se negó a esa posibilidad, requirió que los quitaran del padrón. Y ahí se empantanó todo.
Luego, en el sexto piso del Palacio de Tribunales, se consensuó que dos peritos auditen el padrón electoral de Boca para ponerse de acuerdo en el número de asociados irregulares. Lo único que puede llegar a solucionar este entuerto es que se llegue a un acuerdo y se pida una nueva conciliación.
La utopía: que el arreglo sea express y, entre esta noche y el viernes, y las partes vuelvan al juzgado espontáneamente para decir “hay acuerdo, se vota”. No obstante, la realidad marca que, en el mejor de los casos, las elecciones entonces podrían llevarse a cabo el domingo 17 de diciembre, marcando un asterisco en el estatuto ya que allí figura que siempre deben desarrollarse en la primera quincena del último mes del año.
Todo indica que Boca apelará mañana la cautelar. El miércoles, a más tardar, el caso pasará a Cámara, porque hay 72 horas de margen para las partes. Si la Cámara da de baja la cautelar de la jueza, los comicios serán el 17. Si la mantiene, hay que esperar la resolución de fondo de la jueza, que aún no trabajó esa parte del expediente. Y con los pasos procesales lógicos no habrá espacio para que las urnas se abran este año.
En paralelo a este cónclave en Tribunales, Boca denunció -a través de su Departamento de Legales- la falsificación de tres firmas de los socios de la comunidad judía en el reclamo para que las elecciones no se efectuaran el sábado 2 de diciembre por la celebración del sabbat ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 10. La resolución del juez Ricardo Feliz Baldomar, a cargo del Juzgado Penal Contravencional y de Faltas N°22, dio lugar al pedido realizado por el fiscal Diego Espada de reprogramar los sufragios.
Fue llamativo que no fueran los damnificados quienes radicaran la denuncia sino los miembros de la actual Comisión Directiva. El acta notarial presentada indicó que tres de los supuestos socios denunciantes no firmaron el documento con el que se pidió pasar los comicios al 3 de diciembre.
El martes pasado, la Justicia había ordenado suspender las elecciones tras un pedido de la lista opositora encabezada por Andrés Ibarra y Mauricio Macri, que enfrentarán a Juan Román Riquelme y Jorge Amor Ameal, postulantes del oficialismo. La magistrada Alejandra Débora Abrevaya -hermana de Sergio Abrevaya, presidente del GEN, partido que integra Juntos por el Cambio-, a cargo del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 11, interpuso una medida cautelar y resolvió este martes “suspender el acto de elecciones” hasta tanto se definan “la situación de irregularidades detectadas prima facie del padrón mediante la acción correspondiente de depuración”.
Fuente: (Infobae-Télam)