El presidente Alberto Fernández habló este lunes a la siesta a través de cadena nacional, en ocasión de conocerse la filtración de chats entre jueces, funcionarios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y directivos de Clarín, donde se diagramó una estrategia para esconder pruebas que dieran cuenta de un viaje realizado en octubre a la mansión de Joe Lewis, en Lago Escondido.
El escándalo se desató este domingo, cuando se conocieron las conversaciones entre magistrados, fiscales, empresarios y primeras líneas del gobierno de la Ciudad, intentando esconder evidencia o directamente advirtiendo sobre la posibilidad de fraguarla.
El presidente destacó luego que ha instruido al ministro de Justicia, Martín Soria, a presentarse ante el Ministerio Público Fiscal para que se investiguen los hechos, especialmente lo vinculado al financiamiento.
Dijo además que ha solicitado que el representante del Poder Ejecutivo ante el Consejo de la Magistratura inicie un sumario que investigue la conducta de los magistrados federales. Y por último, le solicitó al bloque de legisladores de CABA que evalúe el desempeño de los funcionarios involucrados, a los efectos de solicitar un eventual juicio político.
«Espero que tomemos conciencia de la gravedad de los hechos. Lastima a la democracia la promiscuidad antirrepublicana con la que se mueven empresarios, jueces, fiscales y funcionarios. Hasta acá se han sentido impunes, ahora deberán dar respuestas», expresó Fernández.
Para finalizar, el jefe de Estado le reiteró al Congreso la necesidad de que se discuta la Reforma Judicial y se cubra el cargo de procurador General de la Nación.