La primera reacción pública a la oferta salarial que presentó este lunes el Gobierno provincial a los docentes provino de la Agrupación Rojo y Negro de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) que se pronunció por el rechazo.
Aunque la decisión respecto de la aceptación o rechazo a la oferta que formuló el Poder Ejecutivo -que consiste en un incremento escalonado, que llega hasta noviembre, del 35%- se resolverá en el congreso provincial de Agmer de este miércoles, la Rojo y Negro ya hizo conocer su postura: no está de acudo con la oferta.
La Rojo y Negro es la primera minoría en Agmer: tiene la conducción de 5 seccionales: Paraná, Federación, Tala, Villaguay y Nogoyá. Aunque esta última tiene una situación peculiar: su secretario general, Eugenio Medrano, renunció, desde el 1° de enero último, a la licencia gremial que le corresponde por ser titular de una seccional. Además, ha tomado distancia de la Rojo y Negro, al punto que no firma los documentos de la agrupación. El argumento para rechazar la licencia gremial es que su mandato concluyó en 2020, cuando debían realizarse las elecciones de renovación de mandatos, situación que se aplazó por la pandemia.
En Agmer fueron prorrogados los mandatos.
Las disidencias hacia el interior de las agrupaciones pueden inclinar la balanza hacia uno u otro lado en las votaciones de los congresos. Los afiliados de Agmer suman 30.874. Y los congresales, 126, repartidos así: Integración por un Agmer de Todos más la aliada Isauro Vive, de Concordia, tiene 66 congresales; el resto de las agrupaciones, con la Rojo y Negro a la cabeza, 60. De esos 60, 47 son Rojo y Negro. Nogoyá aporta 5 congresales.
Más allá de la ausencia de Nogoyá, el documento de la Rojo y Negro marca una fuerte distancia respecto de lo ofrecido este lunes por el Gobienro, una suba escalonada del 35%: de 5 % en mayo; 10 % en julio; 10% para septiembre; y 10 % en noviembre, porcentajes que se aplicarán sobre los salarios de febrero sobre los que se había dispuesto un aumento por decreto al fracasar la paritaria.
Al respecto, señaló que «sostenemos que esta propuesta salarial, así planteada, no puede ser aceptada. Debemos rechazarla, solicitar que sea mejorada tanto en los porcentajes como en los tiempos que se proponen y a su vez, coordinar con otros sectores de trabajadores, que ni siquiera han sido convocados, un plan de lucha que debemos llevar adelante ante este gobierno que no dudó en esconderse el año pasado y que con migajas pretende sortear su responsabilidad».
«Sin ánimo de ser reiterativos, entendemos que es una propuesta salarial que no contempla la enorme pérdida del poder adquisitivo que han sufrido nuestros magros salarios, como así tampoco no tiene en cuenta para nada la urgencia que amerita la situación económica de uno de los sectores de trabajadores más postergados de nuestra provincia -señaló la Rojo y Negro-. Con salarios rozando la línea de la pobreza, no es posible esperar hasta junio para ver unos pocos pesos más en nuestros bolsillos. Los porcentajes ofrecidos y los tramos establecidos en esta propuesta salarial deben corregirse».
Pero además, cuestionó la decisión del Consejo General de Educación (CGE) de haber dispuesto al vuelta de las clases presenciales en el ciclo lectivo 2021. «Con la apertura a mansalva y sin cuidados, la pandemia ha llegado a nuestras escuelas. El aumento de casos es consecuencia de la presencialidad sin condiciones aplicada por el gobierno hace poco más de un mes. En vísperas del endurecimiento de la cuarentena, la propuesta de Bordet ofrece aumentos en tramos que recién empezaría a pagar a los docentes en el mes de junio, cuando ni sabemos en qué tipo de mundo estaremos viviendo», señaló.
Fuente: Entre Ríos Ahora