El secretario general del gremio denunció que una línea opositora a su conducción ingresó al sindicato y causó destrozos. Antes hubo incidentes en la puerta y enfrentamientos con la policía. Los episodios se producen en el marco de una huelga en las líneas de la principal empresa de colectivos.
Mientras decenas de líneas de colectivos pertenecientes al grupo DOTA realizan un paro por tiempo indefinido, la oposición a la conducción de Roberto Fernández en UTA tomaba este lunes la sede del gremio, ubicada en el barrio de Once, en la Capital Federal.
En la puerta del edificio de la calle Moreno se registraron incidentes y enfrentamientos con la policía.
El propio Fernández confirmó la toma y destrozos dentro de las instalaciones de la sede. «Estoy arriba del techo en este momento. Me tomaron el gremio del primero al quinto piso. No sé a quién más hablar, son un grupo de borrachos, del grupo DOTA. Esto es culpa de los monopolios. No veo a nadie de la Policía. Estamos pidiendo socorro. Quizás estas son las últimas palabras que te digo. No sé cuántos heridos hay, quiero que la Policía venga a ver si nos puede sacar. Están entrando con todo, piedras, palazos. Hace 1 hora que llamé a la Policía y nosotros estamos acá en el techo. Es la vida de ellos o la mía. Me tomaron el gremio a los palazos. Si suben los mato a fierrazos», le dijo el dirigente a Jonatan Viale en radio La Red.
Fernández denunció la connivencia del grupo DOTA con el raid de violencia.
Además, dijo que terminó en una oficina encerrado en la sede de la UTA y que hay gente herida junto a él. Pidió por ese medio a la Policía que entre y que el interior del edificio está completamente destrozado. La Guardia de Infantería está trabajando en el lugar, para calmar la situación.
Alberto Crescenti, titular del SAME, informó que 11 heridos ya fueron trasladados a diversos hospitales de la Ciudad y no descartan que haya más. «No se puede entrar, estamos a distancia prudencial porque no sabemos el peligro que corremos«, expresó. Hay 7 unidades del SAME trabajando en el lugar. Los centros de salud de la zona ya están en alerta.
Estos episodios tienen como marco la huelga sorpresiva por parte de las línea de DOTA por el despido de un delegado de la línea 257. La medida de fuerza no contó con el acompañamiento de la cúpula de UTA, encabezada por Fernández. «No la avalamos», dijeron desde el gremio.
El paro fue impulsado por Miguel Bustinduy, un exempleado de la DOTA que renunció al Consejo Directivo de UTA enemistado con Fernández. Además, los trabajadores de la empresa realizaron piquetes en los principales accesos a la Capital Federal, como los puentes Pueyrredón, Alsina y La Noria.
«Hay paro de 50 líneas de colectivo por el despido de un compañero que tenía fueros», explicó Miguel Bustinduy dirigente de la UTA en diálogo con El Destape y afirmó que hace una semana iniciaron el reclamo. «El paro va a durar lo que tarde en solucionarse el problema», agregó.
En tanto, desde UTA, no avalaron el paro y afirmaron que no es una medida del gremio. «El consejo Directivo Nacional de la UTA, con motivo del paro sorpresivo del Grupo Dota y sus empresas vinculadas en el día de la fecha, informa al público en general que la UTA no ha decidido ni avala en lo más mínimo dicha medida de fuerza», indica el comunicado que lleva la firma del Secretario General, Roberto Fernández.
Con el cambio de gobierno, el liderazgo de la UTA está en juego. En un principio, Fernández apoyó al gobierno de Mauricio Macri y luego se desligó de él.