Fue encontrado esta tarde en zona de Bajada Grande por un kayakista, que participaba como voluntario en la búsqueda. El cuerpo de Fiorella Furlán fue encontrado por un kayakista, Jerónimo Albornoz, que se sumó de manera voluntaria a la búsqueda desde ayer. El cadáver estaba flotando en el río Paraná, a la altura de Bajada Grande.
El kayakista la halló y dio aviso a las autoridades. El cuerpo fue trasladado hasta la costa, más precisamente al Club de Pescadores. Allí fue cargado a una camioneta forense, para el posterior traslado a la Morgue de Oro Verde, donde se realizarán las pericias del caso. La joven de 22 años que cayó con su auto al arroyo Antoñico de Paraná en medio del temporal de lluvias y viento que golpeó este fin de semana a la ciudad.
Fiorella perdió el control de su vehículo cuando circulaba el sábado por la tarde por la calle Gálvez, a pocos metros de la avenida Ramírez. Entonces cayó desde un puente mientras cruzaba el arroyo Antoñico, que estaba crecido por las precipitaciones, que acumularon unos 200 milímetros en pocas horas. El automóvil de la joven fue encontrado vacío con su parabrisas roto horas después, a 300 metros del puente donde cayó, por lo que existen esperanzas de que esté con vida.