La modelo que compartió un viaje a México con el fallecido fiscal habló en diferentes medios. Además denunció que las fotos que los muestran juntos fueron robadas
Florencia Cocucci, modelo de 25 años, pasó al centro de la escena en la investigación de la muerte de Nisman cuando se descubrió que habían compartido un viaje a México a principios de noviembre de 2014. Además, se creía que tenían una relación sentimental. Luego de declarar ante la fiscal Viviana Fein y desmentir todos los rumores que la vinculaban con el fallecido fiscal, la joven contó su historia en diferentes medios de comunicación.
En los estudios de InfobaeTV, Cocucci reconfirmó los detalles que dio en anteriores entrevistas y profundizó en otros: «No me arrepiento de haberlo conocido, aunque sí es un antes y un después en mi vida», reconoció.
La vinculación con Alberto Nisman se dio a partir de unas fotos publicadas por una cuenta de Twitter. La modelo aseguró que la cuenta «es trucha» y que «fue denunciada», pero además acusó: «Las fotos fueron robadas, claramente, porque yo nunca las tuve. Son del teléfono de Nisman. No sé cómo las encontraron, pero fueron robadas».
Asimismo, explicó por qué decidió hablar con los medios: «Se dijo que era prostituta vip, que era la novia (de Nisman) y que era la mujer calcinada al frente de Le Parc. Después de la declaración estuve más tranquila porque me trataron muy bien. Estuve todo un día pensando qué hacer y decidí hablar. Esconderme no, porque sabía que me iban a seguir buscando y era demostrar que soy la ‘novia de’ o que me señalen como la novia o amante de Nisman. Como no lo soy y no tengo nada que ocultar, quiero limpiar mi imagen y que no sigan diciendo cualquier barbaridad».
La modelo ratificó que conoció al fiscal de la causa AMIA en septiembre del 2013 en el boliche Rosebar y que de ahí en más lo vio «un par de veces en el 2013» y que no lo volvió a ver «hasta mayo del 2014, siempre en el mismo boliche».
Sobre el viaje a México, reconoció que viajaron en el mismo avión pero «en asientos separados». Y contó cómo fue que llegaron a viajaron juntos: «Cuando me surgen trabajos afuera, le comento a él y me dice ‘uh, qué bueno, yo me quiero tomar vacaciones. Me fijo si esta gente es de confianza y si está todo bien, andá tranquila’. Yo dije ‘listo, no me ocupo más’. Después de un tiempo me dice que estaba todo bien y que él se iba al mismo lugar. Ahí nos vimos, compartimos una cena, playa, normal, como cualquier persona que va de vacaciones».
Sin embargo, Cocucci admitió que le llamó la atención que Nisman quisiera viajar con ella: «Me pareció raro pero no sospechoso. Nunca sentí que quería algo conmigo. Nunca me lo hizo saber, de ninguna manera. Me pareció raro pero nada más». Y agregó: «Tampoco era una persona que le podías preguntar mucho o hablar mucho porque era muy reservado».
Debido a su nueva sobreexposición y vinculación con el fiscal fallecido, la modelo no evitó hablar de su seguridad. Si bien afirmó que no sintió su vida en peligro «en ningún momento», manifestó que en su entorno se preocuparon: «Es el caso más importante de la Argentina en estos momentos y lo va a seguir siendo, así que estaban preocupados porque nunca se sabe qué puede pasar. Por más que yo no tengo nada que ver, es peligroso. Más que nada por la seguridad y porque los medios hablan mucho y saben poco».