La Conmebol le dio por ganada la serie a River, que el jueves a las 22 va contra Cruzeiro, pero no le suspendió la cancha de Boca. La sanción habla de cuatro partidos a puertas cerradas, cuatro sin público visitante y 200 mil dólares de multa.
Como consecuencia del aberrante hecho de violencia que sucedió en la Bombonera, los dirigentes de la Conmebol decidieron reunirse de manera urgente para decidir y comunicar lo que sucederá con el Superclásico. El cónclave se realizó ayer en la Sede de la institución, que se encuentra en Asunción, pero las charlas continúan por estas horas, hasta que se haga pública la determinación.
Luego de mucho evaluar, el ente máximo del fútbol sudamericano, amparado en el análisis realizado por el Comité de Disciplina y sustentado por Juan Ángel Napout, presidente de la Confederación, ya tendría su veredicto. Si bien aún no lo hizo oficial, tras analizar el descargo presentado por Boca, resolvería esta cuestión de forma definitiva. Cabe destacar que Joseph Blatter, mandatario de la FIFA, exigió una rápida resolución, considerando la gravedad de lo acontecido.
Si bien en un principio Daniel Angelici anunció que acatarían las órdenes de la Conmebol, el propio dirigente viajó hacia Asunción para dar batalla junto a César Martucci y a los letrados de la institución y tratar de forzar la continuidad del encuentro. En el seno dirigencial «xeneize», igualmente, no son optimistas respecto a esto, pero estarán atentos a lo que suceda en cuestión de horas, ya que entienden que el equipo no provocó los incidentes y debieran disputarse los 45 minutos restantes.
El Tribunal, que cuenta con tres de sus cinco miembros más importantes, ya escuchó la palabra del presidente de Boca y se presta al análisis minucioso de lo sucedido para dictaminar una resolución. Los integrantes del Comité Disciplinario presentes son: el brasileño Caio César Vieira Rocha, el uruguayo Adrián Leiza y el boliviano Alberto Lazada. En tanto, el chileno Carlos Tapia y el colombiano Orlando Morales están ausentes debido a que no consiguieron pasajes.
Mientras tanto, llegaron más indicios desde Brasil. Cruzeiro, adversario que espera por uno de los dos en Cuartos de Final, habría sido notificado de la clasificación de los de Núñez, por lo que en su página web oficial ofrece viajes para presenciar el duelo por la Ida de dicha instancia, que se llevaría a cabo este mismo jueves (el desquite en Belo Horizonte, se desarrollaría el miércoles 27).
La decisión de la Conmebol:
* Darle por ganado el partido a River (el artículo 23 reglamenta que tiene que ser con un resultado de 3-0). Por lo tanto, sería el equipo millonario el que lograría acceder a los Cuartos de Final de la Copa Libertadores, instancia en la que ya espera Cruzeiro (se jugaría la semana que viene, en el Monumental; luego, en Belo Horizonte).
* Boca sería suspendido para jugar competencias internacionales hasta 2017. Esto significa que no podría participar de la Copa Libertadores y Copa Sudamericana 2016, más allá que logre la clasificación por el campeonato local.
* La ‘Bombonera’ no podría albergar partidos internacionales por dos años.
* Ambos clubes tendrían que abonar una multa económica. ¿Por qué? Porque sus respectivos dirigentes ingresaron al campo de juego, algo que está prohibido.
Disputa en Paraguay entre River y Boca:
En una de las reuniones, hubo una clara puja entre Boca y River. Los dirigentes «xeneizes» pretendían que el encuentro continúe y aducían que el club no fue el responsable de lo sucedido, sino que culpan a la Seguridad; mientras que en el «Millonario» se basaban en uno de los Artículos del Reglamento, que marca que la Serie tendría que darse por terminada con triunfo para el club que resulte como víctima. En este contexto, desde la institución de La Ribera intentaron que se juegue entre hoy y mañana, considerando que no habrá fútbol local por la suspensión de la fecha como consecuencia de la muerte de Emanuel Ortega. ¿Qué dijeron desde Núñez? Más allá de lo anteriormente esgrimido, también se ampararon en que los jugadores afectados deberán tener un reposo de 72 horas, motivo por el cual no están en condiciones de jugar en los días propuestos por Boca.
