Según contó la adolescente de 16 años, el hombre primero se sobrepasó con su madre y después con ella. Al intentar defenderse lo acuchilló.
Una adolescente de 16 años confesó en las últimas horas que asesinó a puñaladas un remisero de Bahía Blanca después de que el sujeto en cuestión intentara abusar sexualmente de ella y de su madre.
Aunque la joven se autoincriminó, la Justicia decidió que no quedara detenida, pero sí que fuera imputada. Del mismo modo, recientemente trascendió que el fallecido tenía antecedentes penales, ya que había sido denunciado en tres oportunidades por el delito de “exhibiciones obscenas”.
Lo que se sabe hasta el momento es que la atacante se presentó de manera espontánea en la comisaría 4ta de esa ciudad, donde explicó que ella había matado a Alberto López, un remisero de 72 años que había intentado violarla.
El crimen de López se descubrió el jueves de la semana pasada, cuando sus familiares alertaron a la policía sobre el hallazgo del cadáver en la casa en la que él vivía.
El cuerpo del fallecido fue encontrado por la policía en el baño de su casa, y según determinó la autopsia, presentaba tres heridas de arma blanca en diferentes partes de su espalda.
Después de que se conociera esta información, finalmente la joven decidió atribuirse el crimen, por lo que quedó imputada pero no detenida.
Según contó recientemente la madre de la chica, lo que ocurrió es que ella contrató al remisero para que la llevara hasta el penal de Saavedra, pero que en el viaje él le comenzó a tocar la entrepierna, y en varias oportunidades la manoseó.
“Nunca me imaginé que lo iba a ir a buscar. Fue a preguntarle por qué había hecho una cosa así y él la manoteó, la quiso violar. En ese momento atinó a agarrar el cuchillo para asustarlo, para sacárselo de encima”, aseguró por último.
Lo cierto es que esta no es la primera acusación de delitos sexuales que la víctima debió enfrentar en su vida, ya que López había sido denunciada dos veces en 2012 y una tercera en 2014 por el delito de “exhibiciones obscenas”.
La causa estaba a cargo del titular de la Unidad Funcional de Instrucción de Bahía Blanca, Jorge Viego, pero cuando se conoció que la adolescente se incriminó, el expediente fue girado a la fiscalía del Menor de la ciudad, a cargo de Betina Ungaro.