Tras el accidente cambió su carácter. Su padre construyó la celda para evitar que se escape de su casa y los vecinos se ocupan de darle de comer.
Un chico de Tailandia lleva cinco años encerrado en una jaula de madera que su padre construyó para evitar que se escape de su casa. El hombre explicó que su hijo se golpeó la cabeza y su carácter cambió.
Porrames tiene nueve años y hace cinco que pasa el día en una jaula de 2.5 metros por 2 que construyó su padre en el jardín de su casa en Krabi, Tailandia, informó el sitio Daily Mail.
Los vecinos se encargan de darle de comer cuando su progenitor está en el trabajo.
Parecería un caso de maltrato infantil pero el padre de Porrames, Chamnan Duangjan, aseguró que es su hijo cambió completamente desde que se golpeó la cabeza en 2012 y si lo libera corre peligro de que se vaya al bosque.
Duangjan, un trabajador de la industria del caucho que tiene 38 años, explicó que el chico tiene comportamientos erráticos por lo que ni siquiera lo puede mandar al colegio o dejarlo en manos de sus hermanos, de 15 y 20.
La madre de Porrames se fue poco después del episodio en el que el chico se golpeó la cabeza.
«Lo llevé a varios hospitales pero sus síntomas nunca mejoraron. Tenía miedo de que corra peligro», explicó el hombre sobre la extraña decisión de encerrar a su hijo.
