La imprudencia humana sería el causante de un incendio de montes naturales que ya consumió 400 hectáreas y el fuego continuaba avanzando en San Rafael.
El siniestro se desató en la zona comprendida entre las rutas, provincial 191 y la nacional 144, en las inmediaciones del cerro Bola, en el departamento sureño.
Una cuadrilla del Plan Provincial de Manejo del Fuego (PPMF) está trabajando desde ayer y una segunda unidad partió desde la base de Monte Comán para reforzar las tareas. Además hay un cambión de acción rápida 4×4 y vecinos que están colaborando.
Los brigadistas pudieron corroborar lo que primero escucharon por boca de vecinos del lugar. El fuego se inició por la acción del ser humano. Un par de amigos en cuatriciclos estuvieron recorriendo la zona, hicieron fuego para disfrutar el tradicional asadito en el campo pero al retirarse no apagaron debidamente las brasas.
El personal del PPMF encontró las huellas que dejaron los cuatri y también el punto de partida del siniestro.
Durante la noche del miércoles los combatientes habían logrado cercar las llamas pero las condiciones climáticas reinantes durante la jornada de hoy les jugaron una mala pasada.
El viento constante y la temperatura en ascenso reavivo el fuego y lo potenció. Esto se sumó a las dificultades que presenta el terreno ya que es de difícil acceso.
Según la información suministrada por Guillermo Ferraris, coordinador del PPMF, hasta el mediodía eran 400 las hectáreas que se perdieron pero la cifra continuaba en aumento.
Actualmente los brigadistas luchan a destajo para contenerlo nuevamente y evitar que las llamas alcancen, primero, y traspasen después, la ruta 191. Fuente: (Los Andes).-
