«Guiados por ese espíritu de patriotismo y de abnegación sabemos que hay intereses que son superiores a cualquier otro que sea particular o sesgado», expresó el gobernador tras participar del tradicional Tedeum.
El gobernador Gustavo Bordet encabezó este jueves, junto al vicegoberanador Adán Bahl, y el intendente Sergio Varisco, el tradicional Tedeum que se realizó en la Catedral Nuestra Señora del Rosario de Paraná, en conmemoración de la Revolución de Mayo 1810.
«No es siempre una tarea fácil la que nos toca llevar adelante en cada una de nuestras administraciones, pero guiados por ese espíritu de patriotismo y de abnegación sabemos que hay intereses que son superiores a cualquier otro que sea particular o sesgado», expresó.
«Hay siempre un interés superior que es el de nuestra patria, que es el bien común, que es el de mejorar la calidad de vida de nuestros cuidadanos todos los días», resaltó el gobernador.
El mandatario entrerriano, acompañado por su señora esposa Mariel Ávila; el intendente de Paraná, Sergio Varisco junto a su hija Lucía y el vicegobernador Adán Bahl y su esposa Claudia Silva, entre otras autoridades de las fuerzas de seguridad y del ejecutivo municipal y provincial, participaron del Tedeum que estuvo a cargo del arzobispo de Paraná, monseñor Juan Alberto Puiggari.
Allí, Bordet valoró que «en un aniversario más de la Revolución de Mayo sostener y reivindicar el espíritu del grupo de patriotas para lograr la emancipación de corona británica, con un claro propósito de construir una Nación. Esto se sostuvo hasta 1816, cuando definitivamente se declara la independencia. Es un hito fundacional de la República Argentina».
El mandatario destacó que «aquella generación eran jóvenes de entre 25 y 35 años. Mariano Moreno con 32 años, fue quizás quien más luz puso sobre la revolución de Mayo y ese espíritu joven de rebelión, es lo que nos tiene que alentar hoy también para enfrentar las adversidades que se nos presentan».
En este marco, convocó a «trabajar», y por eso «un 25 de mayo como hoy, lluvioso como aquel de 1810, tenemos que redoblar el esfuerzo para ser un poco mejor todos los días como país y como personas».
Bordet resaltó que «vemos al país con mucha esperanza. A mí no me toca ser comentarista de la realidad y no me toca ser un espectador de la realidad, yo tengo que protagonizarla todos los días desde el lugar de trabajo que me ocupa y lo hago con mucha responsabilidad y poniendo lo mejor de mí y exigiéndoles a mis funcionarios que lo hagan en el mismo sentido. Hay que trabajar en conjunto con el gobierno nacional, con los gobiernos municipales, con todas las organizaciones de la sociedad civil para buscar una sociedad mejor».
Por otro lado, apuntó que «venimos trabajando fuertemente en programas que tienen que ver en desarrollo productivo por un lado; habilitando puertos en nuestros ríos que generen competitividad y mayor producción y empleo en la provincia. Venimos trabajando en materia de contención socio sanitaria de la población para poder darle inclusión a muchos vecinos que están debajo de la línea de pobreza, incluso muchos que cayeron ahora debajo de la línea de pobreza».
Resaltó que «es nuestra obligación estar no sólo asistiendo, sino viendo cómo se soluciona estructuralmente el problema que nos aflige y duele a todos. No somos nada, no hay obras, si no hay desarrollo de la persona y en este sentido es muy importante generar distintos tipos de actividades que puedan ser culturales, deportivas, recreativas y esto hay que hacerlo en conjunto con los municipios».
«Una gestión es un todo, hay que verla de manera integral y por eso esta relación que tenemos de mucha madurez con el gobierno nacional, que la tenemos también los gobiernos municipales propenden justamente al desarrollo del bien común», puntualizó.
Luego, en Casa de Gobierno, el gobernador Gustavo Bordet, encabezó los saludos protocolares.