Ammar Entre Ríos, presentará un proyecto de ley para regular el «trabajo sexual autónomo». El objetivo es que las trabajadoras puedan acceder a «derechos laborales y condiciones dignas».
Se realizó en la sede de la CTA Paraná la «Mesa de Incidencia política ‘Hacia el reconocimiento del Trabajo Sexual'» organizada por la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (Ammar).
En La oportunidad, las meretrices socializaron el borrador del proyecto de ley que presentarán en la provincia para regular el «trabajo sexual autónomo» y de esta forma acceder a «derechos laborales y condiciones dignas».
La propuesta, según informó la entidad a APF, consiste en crear un «registro único de Trabajadoras Sexuales que dependa del Ministerio de Trabajo para que la entidad pueda controlar el ejercicio de la actividad de forma voluntaria».
También propone la habilitación de «cooperativas de meretrices para acabar con la explotación y el registro como monotributistas para acceder a obra social, aportes jubilatorios, créditos, vivienda, entre otros derechos que hoy no poseen las meretrices», se detalló en un comunicado.
Las trabajadoras en el encuentro de la «Mesa de Incidencia política ‘Hacia el reconocimiento del Trabajo Sexual'» se refirieron a la idea de «instalar el debate sobre el acceso a derechos laborales por parte de mujeres, mujeres trans y hombres mayores de 18 años que deciden ejercer voluntaria y autónomamente el Trabajo Sexual».
Frente a este punto, Norma Torres, secretaria general de Ammar Entre Ríos destacó: «Aunque en el año 2003 desde Ammar logramos la derogación de los artículos contravencionales para que en la provincia no nos lleven presas por ejercer en la vía pública, en la actualidad, por el impacto de las políticas anti-trata que no diferencian entre trata y Trabajo Sexual han cerrado todos los lugares para ejercer en espacios privados y las compañeras están expuestas a una mayor clandestinidad.
Y agregó: «Nosotras estamos en contra de la trata y justamente pedimos que se legalice nuestra actividad para que se combata realmente este delito y no corten el hilo por lo más delgado, vulnerando los derechos de nosotras las Trabajadoras Sexuales, quienes nunca fuimos convocadas para debatir la Ordenanza».
Luego Torres consideró que «prohibir y cerrar las fuentes de Trabajo de nuestras compañeras no es revolucionario como lo plantean algunos políticos cuando clausuran departamentos, cabarets y whiskerías; lo realmente revolucionario sería escuchar nuestras voces y dar derechos a las minorías».
«Afortunadamente, Entre Ríos es una de las pocas provincias que derogó artículos contravencionales por prostitución y las Trabajadoras Sexuales no van presas por ejercer en la vía pública, pero quienes regenteaban lugares hoy les están cobrando la parada en la esquina a las compañeras», enfatizó Georgina Orellano, secretaria general de Ammar Nacional.
Y añadió: «Si se regulara nuestra actividad esto no sucedería, estaríamos amparadas por el Estado a través de derechos y garantías y no seríamos perseguidas, criminalizadas y precarizadas. Pedimos presencia estatal desde una perspectiva de derechos y no desde el control de nuestros cuerpos».
Antecedentes
La provincia de Entre Ríos, al igual que Santiago del Estero, Santa Fe y Capital Federal, es una de las provincias que derogó los artículos contravencionales que facultaban a la policía para llevar presas a las trabajadoras Sexuales que ejercían en la calle.
El artículo 45 de la ley de Contravenciones 3815 de la provincia databa de 1952 y fue derogado en el 2003, seis años después de creada la filial de Ammar Entre Ríos.
Desde su fundación, Ammar Entre Ríos pertenece a la Central de Trabajadores de Argentina CTA. A Lo largo de 18 años ha logrado fortalecer el movimiento de Trabajadoras Sexuales en la provincia y ha articulado con distintas organizaciones de base, sindicales e instituciones defensoras de Derechos Humanos y centros de salud sensibilizados para brindar una atención amigable a quienes ejercen la labor.
Palabras de la CTA Entre Ríos
Luis Gálligo, secretario general de la CTA Entre Ríos, expuso que «la CTA siempre ha cobijado a las Trabajadoras Sexuales para que se sientan protegidas. Nuestra preocupación y deseo es el blanqueo de todos los trabajadores, pero frente al ejercicio del Trabajo Sexual hay cuestiones sociales que complican el debate. En distintos espacios he planteado que el cierre de whiskerías y cabarets fue un error porque aumentó la clandestinidad. Es mejor tener conocimiento de los lugares, controlarlos y regular para verdaderamente combatir la explotación y la trata. El Trabajo Sexual debe ser reconocido y la CTA las respalda».
Por su parte, Guadalupe Pérez, representante de la Diversidad de Ammar Entre Ríos planteó: «Buscamos mejorar las condiciones que ya tenemos, no queremos otro trabajo. Las mujeres y mujeres trans que ejercemos el Trabajo Sexual no pretendemos cambiarle la ideología a nadie, luchamos por nuestros derechos y condiciones dignas. Hemos solicitado distintas audiencias en el poder ejecutivo y legislativo pero no hemos obtenido respuesta».