La chica estaba embarazada y por miedo no les dijo nada a sus padres. El 5 de marzo dio a luz en su cuarto y la criatura murió. El fiscal aseguró que fue asfixiada con un trozo de papel que le metieron en la boca.
Una adolescente de 17 años y su madre fueron imputadas por homicidio agravado por el vínculo y el juez de la causa, a pedido de la Fiscalía, le dictó 6 meses de prisión preventiva a la progenitora, en la localidad de Sarmiento, en la provincia de Chubut.
La chica estaba embarazada y por miedo no les dijo nada a sus padres. El 5 de marzo dio a luz en su cuarto y la criatura murió. El fiscal aseguró que fue asfixiada con un trozo de papel que le metieron en la boca.
La apertura de la causa se realizó ayer en la Oficina Judicial de Sarmiento y el acto lo presidió el juez penal, Roberto Casal, a quien el fiscal general Herminio Gonzales Meneses le pidió que se formalice la investigación en contra de Miriam Marcela Sahiueque (37) y su hija de 17 años como coautoras del delito de homicidio agravado por el vínculo. El acusador sospecha que le colocaron un bollo de papel en la boca al bebé que la adolescente tuvo sola en su cuarto y cree que fue para causarle la muerte.
En la oportunidad, el fiscal informó que los hechos a investigar ocurrieron el domingo 5 de marzo, entre las 3 y las 18:30, en un domicilio ubicado sobre el pasaje Estrada. En esa casa se encontraban Marcela Saihueque junto a su esposo y sus dos hijas, de 17 y 15 años de edad. La primera de ellas se encontraba embarazada.
En este contexto, se confirmó que la menor dio a luz un niño. El nacimiento tuvo lugar durante la madrugada del primer fin de semana de marzo. También se informó que la documentación de la autopsia practicada por los médicos forenses certificó que el bebé nació con vida y tuvo un peso de 3,4 kg.
El fiscal señaló que su hipótesis se basa en la firme sospecha de que la abuela y la madre del recién nacido fueron quienes colocaron un bollo de papel de grandes dimensiones en la boca del bebé.
Entre los elementos de investigación colectados, Gonzales Meneses confirmó que las conclusiones médico-legales determinaron que como consecuencia de este acto le causaron la muerte por asfixia mecánica por sofocación, debido a la obstrucción de la vía aérea superior.
Con respecto a la calificación legal provisoria escogida por el equipo de investigación, la misma corresponde a un caso de homicidio agravado por el vínculo.
En este marco, el fiscal describió el escenario de los hechos, la intervención de las profesionales que integran el área de Criminalística y los informes del cuerpo médico forense.
También pidió un plazo de seis meses para concluir la investigación y la aplicación de medidas de coerción para las dos imputadas.
Como fundamento de su requisitoria, sostuvo que de los componentes que obran en el legajo surgen elementos de convicción suficiente para sostener, con el grado de probabilidad que exige esta etapa del proceso, que las sospechosas podrían ser las autoras del hecho grave que se investiga.
La madre y la hija declararon y no respondieron preguntas por parte del Ministerio Público Fiscal. En este sentido, Sahiueque manifestó que ese domingo, como a las 7, escuchó a su hija que estaba en el baño de la planta baja y le preguntó qué le pasaba. “Me contestó que le había llegado su periodo de menstruación y tenía una pérdida. Luego me levanté, le di unas toallitas femeninas, le preparé una chocolatada y nos volvimos a dormir”.
“A la una nos levantamos para almorzar, después subí a su pieza y vi todo manchado. Con su hermana más chica llevamos el colchón al quincho y nos pusimos a limpiar. También puse diarios y limpiamos con cera el piso de la habitación para que no se pudriera la madera. Le dije que se bañara para ir al médico. Su hermana me dijo que la notaba rara. Cuando subí y revisé la habitación vi los pies del bebé que se asomaban en un cajón. Bajé y le dije a mi marido. El subió y llevó el cuerpo al quincho. No vi lo que hicieron en ese lugar. Nos pusimos de acuerdo para que fuera a avisar a la policía junto a mi hija menor. Con mi hija nos quedamos esperando a que llegaran. Después fuimos al hospital y es todo lo que hice”.
Con respecto al embarazo de la adolescente, dijo que “teníamos sospechas, le preguntamos y nos dijo que estaba gorda nomás. Yo pensé que si estaba a los sumo sería de tres meses porque no tenía panza y que más adelante me lo iba a contar”.
En tanto, la menor de 17 años afirmó ante el juez que el día anterior sintió las contracciones, pero se reprimió. “A las cuatro y media de la mañana sentí que estaba naciendo el bebé, miré y le salía la cabecita, pero era como que no podía salir. Hice todo sola. Entonces hice fuerza con las manos para sacarlo, lo tomé del cuello, no sé la fuerza que hice porque estaba como medio inconsciente”.
En su relato, sostuvo: “intenté que llorara pero no respondía, lo envolví y sentí que me estaba desangrando. Fui a ver a mi mamá, me dio unas toallitas y tomamos la chocolatada. Después escondí al bebé. No recuerdo haberle metido el rollo de papel, para mí que no lo hice”.
Por último, sobre su situación de estado de gravidez la joven manifestó: “yo quería tenerlo, no dije nada por miedo”.
Fuente: ElOnce.com