El presidente Macri sufrió una arritmia por la cual debió permanecer internado cuatro horas en la Clínica de Olivos, donde se le hicieron los estudios correspondientes, mientras que cerca de la medianoche recibió el alta.
El mandatario se retiró del centro médico cerca de las 23.15 tras haber ingresado a las 19.15 al lugar, donde la mayor parte del tiempo estuvo acompañado por su esposa Juliana Awada y su hija Antonia.
Minutos después de que Macri abandonara la clínica, el director de la unidad Médica Presidencial, Simón Salzberg,
confirmó que el mandatario durante la tarde tuvo «síntomas de palpitaciones» y debido a eso se le hizo un «electrocardeograma» que arrojó como resultado una «arritmia».
Al respecto, el médico señaló que a raíz de que con el paso de las horas esa situación no se revirtió, se decidió el
traslado a la clínica para hacerle los chequeos correspondientes, que fueron una arteriografía y un ecocardiograma doppler, para los cuales debió ser anestesiado.
«Le indiqué que mañana (por este sábado) es que haga reposo y el lunes retoma su agenda normalmente», añadió el médico en declaraciones a la prensa en la puerta de la clínica.
Salzberg precisó que con una arritmia «suele suceder que en pocos minutos revierte sola, entonces no hay que apurarse» para decidir una internación, al tiempo que adelantó es algo «tremendamente común».
Previamente, el vocero presidencial Iván Pavlosky había informado que los estudios realizados a Macri «dieron bien» y
precisó que, como el mandatario fue sedado, los médicos aguardaban que se despertara para definir si pasaba la noche en el cetro médico o volvía de inmediato a la Quinta de Olivos, como finalmente ocurrió.
Una arritmia es una alteración del ritmo cardiaco, que puede causar síntomas como palpitaciones, mareo, síncope, dolor torácico o pérdida de conocimiento.
«No siempre se sabe el por que de la arritmia, puede tener que ver el estrés pero no es tajante», explicó Salzberg, quien al ser consultado sobre si esa afección puede provocar con el paso del tiempo un accidente cerebrovascular, respondió: «Si se hacen las cosas bien, es muy poco probable que derive en un ACV».
«El presidente Mauricio Macri tuvo esta tarde, alrededor de las 15 horas, una leve arritmia que no le impidió continuar con su trabajo y mantener la agenda de actividades previstas en la quinta de Olivos», informó por la noche el Gobierno en un comunicado oficial.
«Al concluir la actividad prevista, siendo ya las 19.30 aproximadamente, la Unidad Médica Presidencial decidió que se
realizara una revisión en la Clínica Olivos. Finalizados los estudios, y al constatarse que se revirtió la arritmia,
permanecerá algunas horas más por precaución, para luego regresar a su domicilio», se agregó.
Horas antes de emitir el comunicado, los voceros presidenciales habían negado las versiones de que el jefe de
Estado había sufrido ese problema, e incluso se difundió una foto del off the record que dio a los periodistas Edi Zunino, Eduardo Feinmann, Walter Curia y Gloria López Lecube, dando a entender que Macri estbaba cumpliendo sus tareas con normalidad.
Según supo NA, los periodistas que estaban entrevistando al mandatario llegaron a notar una situación extraña en el lenguaje corporal de Macri y lo notaron algo «pálido». La angiografía que le practicaron al mandatario es un examen
de diagnóstico por imagen cuya función es el estudio de los vasos circulatorios que no son visibles mediante la radiología convencional.
En tanto, la ecografía doppler es una variedad de la ecografía tradicional, basada en el empleo del ultrasonido, en
la que aprovechando el efecto Doppler es posible visualizar las ondas de velocidad del flujo que atraviesa los vasos sanguíneos y que son inaccesibles a la visión directa.
Al ser consultado acerca de si esta es la primera vez que Macri sufrió un problema de este tipo, Pavlosky, quien es
portavoz del mandatario desde el inicio de su carrera en la política partidaria, respondió: «Que yo recuerde, si».
El único episodio médico que había atravesado Macri desde que es Presidente había sido la fisura de costilla que sufrió el 8 de enero mientras jugaba con su hija Antonia. NA.