Le redujeron la jornada laboral y ahora, recorre los barrios de Posadas ofreciendo lavar autos a domicilio. En un carro enganchado a la bicicleta transporta los elementos necesarios y además lleva un llamativo cartel anunciando su servicio.
El hombre relató que en la ferretería carga sobre sus hombros las bolsas de cemento y los materiales de construcción que están a la venta. «Hace tres meses me explicaron que por la crisis me reducían el trabajo a media jornada con menos sueldo y tuve que buscar otra alternativa, para mantener mi casa», contó el emprendedor al sitio MisionesCuatro.
Vive con su esposa, una hija y un nieto de un año y cuatro meses. El bebé no recibe la cuota alimentaria que exige la ley al padre no conviviente y Luis se encarga de ayudar con su crianza. Cuando se enteró que su sueldo se recortaría, pensó que no podía dejar que el niño pase necesidades, así que decidió realizar su propio emprendimiento y se dijo: «Quizás se pueda armar un lavadero de autos ambulante, usando una bicicleta, ¿por qué no?».
Hoy su «bici-lavadero» recorre las calles posadeñas ofreciendo el servicio de lavado de automóviles a domicilio y ya tiene una cartera de clientes fijos. «Cuando no estoy muy cansado por hombrear bolsas pesadas en la ferretería, llego a lavar hasta seis autos en una tarde», aseguró. En un carro enganchado a la bicicleta transporta los elementos necesarios para hacer su trabajo, desde la manguera y los cepillos, hasta paños y jabones especiales, además lleva un llamativo cartel anunciando su servicio. Para sus clientes, contratarlo es una opción de ahorro y relax, ya que no tienen que ir a un lavadero para tener el auto limpio y cuidado. Fuente El Once