En Málaga, España, tuvieron que retirar a la totalidad de pasajeros que viajaba en una formación, luego de que una joven no pudiera contener un gas que terminó intoxicando a varios.
Un putrefacto aroma descompuso a varios pasajeros que transitaban la línea 1 del subte de Málaga, España. El personal de seguridad presente en la estación se sorprendió al ver que varios de los pasajeros vomitaban y buscaban abrir las ventanas de uno de los vagones e inmediatamente se pusieron en acción para evacuar la formación.
Parece increíble pero una simple flatulencia que soltó una joven dentro del vehículo provocó varios desmayos e intoxicaciones que derivaron en posteriores interrelaciones de quienes sufrieron las consecuencias del pestilente aroma. “Nunca había percibido un olor tan asqueroso”, dijo uno de los empleados y agregó: “Cuando llegué al vagón nº2 me percaté de la gravedad del problema y llamé al maquinista para que detuviera el trayecto y así poder desalojar a los pasajeros”.
La guardia civil comenzó una búsqueda para encontrar el motivo de aquella pestilencia que había provocado desmayos y vómitos entre los pasajeros del subte, y llegaron a una determinación unánime: “Sólo se trató de un pedo”, explicó uno de los oficiales, que agregó: “Una joven se dirigió hacia nosotros para decirnos que el olor tan dañino venia de su estómago. Nos comentó que llevaba siete días bebiendo un famoso vino dulce -Cartojal- y que creía que ese olor tan putrefacto se debía a la ingesta de grandes cantidades”.
En total, 17 personas terminaron en el hospital clínico Virgen de la victoria de la ciudad de Málaga, internados con cuadro de intoxicación. Incluso, la propia joven que soltó la flatulencia fue puesta en observación y, luego de expulsar otro gas, posteriormente quedó en cuarentena. Fuente radio Mitre