Septiembre sería el mes en que el Gobierno nacional apuesta a reabrir el programa.
El Gobierno nacional comenzó a estudiar la posibilidad de hacer un nuevo llamado del plan Procrear para la línea compra. Según confirmó Iván Kerr, Presidente de Procrear, esta semana se reunirá con el ministro del Interior. «Analizaremos la ejecución presupuestaria y observaremos la capacidad de ejecución para proponer un nuevo llamado», afirmó.
El gran problema que está enfrentando el plan es el cuello de botella que se generó en los bancos. Las entidades, en especial el Banco Nación, donde se gestiona más del 60% de estos créditos, aseguran que en la actualidad tienen «estresada» la capacidad para atender este tipo de programas.
Según los datos que adelantó el Jefe de Gabinete Marcos Peña a la Cámara de Diputados, ya hay 133.941 personas seleccionadas para ser beneficiarias, de las cuales, se han realizado 3.696 escrituras para viviendas familiares únicas y de ocupación permanente.
El resto está en pleno trámite. «En la calle hay casi 90.000 personas con un subsidio preaprobado. Deben ir al banco, calificar a un crédito, encontrar la propiedad es un proceso que lleva tiempo», dijo el director de Acceso al Crédito de la Nación, Tomás Bibiloni.
Parte de los fondos que podría reutilizar el Gobierno nacional para un nuevo llamado pueden provenir de esos 90.000 preaprobados que no logren cumplir con todos los pasos.
Otra opción que se está barajando en la Casa Rosada es que se haga un nuevo llamado en septiembrey que, con la propia dinámica de búsqueda de vivienda y trámites, las escrituras del nuevo Procrear se realicen en 2018.
La ventaja que presenta esta estructura es que se podría relanzar el plan que fue un éxito de inscriptos justo antes de las elecciones de octubre, lo que apoyaría la campaña electoral, y que de escriturarse a partir de enero los montos asignados saldrían del Presupuesto 2018.
Mientras Kerr mantiene reuniones con las entidades financieras para seguir de cerca el proceso de aprobación y el estado de situación de las oficinas de crédito en los pasillos de la Rosada reconocen que los bancos estaban acostumbrados a dar tarjetas de crédito y no tienen ni gimnasia ni personal preparado para el sector hipotecario, se espera que el próximo 18 de agosto se tome una decisión. Ese es el día programado para la reunión de seguimiento de Procrear con el presidente Mauricio Macri.
El otro inconveniente que tuvo que sortear la administración central fue la suba del dólar. Como sucedió con los créditos UVA, en un mercado dolarizado como el de las propiedades, hoy hacen falta más pesos que hace un mes atrás para adquirir la misma vivienda.
La reacción oficial fue ampliar el valor límite de la propiedad que puede comprarse con crédito y subsidio oficial. El máximo, que era de hasta $1,65 millón, pasó a $ 2 millones.
El Procrear permite la compra de un inmueble a familias con ingresos entre $ 19.000 y $ 38.000 y combina un subsidio no reembolsable de hasta $ 400.000, un crédito hipotecario UVA y el ahorro familiar, que debe ser de al menos 10% del valor del inmueble.
Según datos oficiales, el monto promedio de los subsidios ha sido de $307.603, y el de las escrituras ha sido de $1.033.264. En el caso de las tasas de interés se encuentran entre 3,5% y 7,8%, dependiendo de las condiciones de cada banco.
Las entidades financieras involucradas son: BBVA, Ciudad, Cordoba, Credicoop, Banco de Tierra del Fuego, Banco del Tucumán, Galicia, Hipotecario, Itaú, Macro, Nacion, Patagonia, Provincia, Santander, Supervielle, HSBC.
Fuente: El Cronista