Salud provincial cuestionó que «los alimentos en cuestión son de baja calidad y contribuyen al desarrollo de obesidad, diabetes e hipertensión»
A partir del anuncio del Gobierno Nacional del listado de los 64 productos esenciales, comprendidos en el Programa Precios Cuidados, el Ministerio de Salud de la provincia, a través de la Coordinación de Prevención de Enfermedades Crónicas no Transmisibles (ECNT), efectuó un análisis sobre la calidad nutricional que determinó que dichos alimentos contienen en su mayoría harinas y altos niveles de grasas, azúcar y sodio.
Para el desarrollo de esta observación pormenorizada se tuvieron en cuenta los resultados de la 4° Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, la cual indicó que 6 de cada 10 argentinos mayores de 18 años presentan exceso de peso y, como consecuencia, en los últimos 13 años la obesidad creció un 74 por ciento en nuestro país.
Estos indicadores tienen relación directa con la alimentación. Por tal motivo, el área provincial resaltó que los productos esenciales no cumplen con los requerimientos nutricionales (calóricos, macronutrientes y micronutrientes) ya que sólo se ofrecen harinas refinadas, arroz, fideos, rebozadores, postres en polvo, polenta, galletitas dulces rellenas, cerveza y vinos.
La ingesta de comestibles de baja calidad nutricional, si bien satisface el apetito de forma inmediata, no favorece al desarrollo de una vida plena y saludable ya que frecuentemente desencadena malnutrición y otros problemas de salud como enfermedades cardiovasculares; obesidad desde edades tempranas; colesterol elevado; hipertensión y diabetes.
Ante esta situación sanitaria y las políticas economías implementadas, la Coordinación de Prevención de ECNT referenció que el alimento es un derecho humano básico por lo que se debería asegurar el acceso real a los productos ricos en fibra, agua, vitaminas, minerales, proteínas de buena calidad y antioxidantes.
Los grupos de comestibles que garantizan dichos requerimientos nutricionales son: frutas y verduras; cereales integrales –frutos secos y semillas-; legumbres; leche; yogur; quesos descremados; carnes y huevos, los cuales son recomendados en la Guía Alimentaria para la Población Argentina y que favorecen a una alimentación variada y equilibrada.
Naturalmente está situación está estrechamente relacionada con los inconvenientes que se registran en el bolsillo de la gente de menores recursos que, como consecuencia de la pérdida de poder adquisitivo, consume productos de menor calidad que integran la canasta alimentaria básica de los distintos grupos etarios. Esta situación, concomitantemente, obliga a esta franja de la sociedad a consumir alimentos que generan sobre todo obesidad ya que se trata, principalmente, de comidas ricas en carbohidratos y grasas en contraste con los nutricionalmente recomendados por las autoridades sanitarias provinciales.