Guillermo Ferrari nació en Concordia, pero vive en Shagai hace 2 años. Es desarrollador de juegos y trabaja de manera independiente. Se fue a China para vivir con Vanesa, con quien se casó allí y ahora vive desde adentro las restricciones que hay en el país por el Coronavirus.
«Si bien estoy en una ciudad grande como lo es Shangai, no me encuentro en el epicentro de la infección, aunque sí tenemos que tomar las mismas medidas de prevención que el gobierno impuso para todo el país», contó «Al principio sabíamos que había un virus pero pensamos que era como todos los demás, pero luego el gobierno puso las restricciones. Justo todo sucedió en año nuevo así que no estábamos en día laboral».
Sobre el modo en que debieron accionar luego de las primeras alertas, señaló: «Nos pidieron que nos quedáramos dentro de nuestras casas y que solamente saliéramos si era necesario comprar. Empezamos a usar barbijos, que no se conseguían porque acá son muchas personas y otros tips de higiene. A esto empezaron a hacerlo todas las personas a fin de año y ya llevamos muchos días, es muy aburrido porque nos pasamos el tiempo encerrados en casa, mirando series y haciendo cosas adentro».
Lo que llega a los medios internacionales es la información que suministran desde China, pero quienes lo viven desde adentro tienen otras percepciones. El entrerriano dio cuenta de cómo lo toman los habitantes de las ciudades chinas: «No es tan grave la enfermedad como se muestra de afuera, que están todo el tiempo bombardeando con información. Sí en Wuhan – la zona del foco infeccioso- es peligroso, tengo amigos allá y dentro de todo están tranquilos, incluso van a comprar a hacer las compras y hacen lo que necesitan siempre siguiendo lo que dice el gobierno, o sea, se mantienen adentro y respetan las reglas de la cuarentena que exige pasarlo en casa, salir cuando es necesario, lavarse bien las manos y usar barbijo», comentó y agregó: «Ayer fui al supermercado y las calles están vacías. No se ve a casi nadie afuera y para una ciudad como Shangai eso es realmente sorprendente. Pensé que todos iban a estar desesperados, pero no es así, hay comida, los locales están bien abastecidos. Si bien la interacción es mínima porque todo está autimatizado, lo poco que interactuás es sin paranoia».
Sobre los plazos que estableció el gobierno para quienes viven en el país, comentó : «Vivimos encerrados y estamos esperando para ver cuánto va a durar esto. Escuchamos que hasta abril tendremos que vivir así, los chicos están sin clases hasta marzo, pero esperamos novedades. No sabemos qué se hará luego de la cuarentena porque ahora estamos en el pico más alto del contagio. Se estima que habría unos 50.000 contagiados y hay mucho trabajo, por lo tanto quieren controlarlo y estamos esperando para saber qué pasará. Las vacaciones de algunas empresas se extendieron, los profesores comenzarán con clases on line para no perder tantos días de clases y así se mantendrán las actividades hasta que pase este pico».
Ferrari también habló acerca de cómo la información también llega de manera distorsionada a otros países y de qué manera obtienen los datos en el país. «Acá usamos las aplicaciones de China para saber qué sucede de manera precisa. Sabemos que hay rumores de miles de muertos en otros países y si hubiera esos números de los que se habla sabríamos porque acá todo se sabe muy rápido. El virus es muy fuerte y por eso el gobierno tomó las medidas exageradas que tomó, y nosotros sentimos que las cosas se están haciendo bien las cosas, por eso estamos tranquilos», dijo y explicó: «Por el momento este virus ha atacado más que nada a personas de la tercera edad que ya tienen problemas desde antes, a ellos es que les resultó mortal. Nos explicaron que si tenés bien las defensas te vas curando solo, pero si se genera algún problema te asisten hasta que te recuperás».
Por último, el concordiense aconsejó a los viajeros. «Hasta abril no aconsejaría a nadie venir a visitar China porque por las medidas que tomó el gobierno lo único que podrían hacer es quedarse encerrados haciendo nada y salir a algún supermercado a comprar comida, así que hasta que todo esto pase tal vez no es conveniente viajar. Igualmente muchos vuelos se cancelan porque no se reúnen los pasajeros necesarios, ya que está pasando esto acá», concluyó.
Fuente: El Entre Ríos
