Los productores advierten que apenas cobran entre 9 y 10 pesos por litro, mientras que en góndola se pagan hasta 50 pesos.
En medio de la crisis por la baja del consumo de lácteos, genera polémica en la población la significativa suba del precio de la leche. En este contexto, los productores reclaman por la brecha que existe entre lo que le pagan a ellos y lo que deben abonar los consumidores finales.
Según Conrado Reggiardo, vocal de la Cámara de Productores de Leche de Entre Ríos -Caproler-, el productor recibe entre 9 y 10 pesos por litro de leche, pero el costo para producir cada litro es de 12 pesos, por lo que desde el 2015 el sector viene aumentando sus deudas.
Sin embargo, la mayor tajada queda en la cadena de industrialización y comercialización, ya que el precio de un sachet de leche cuesta alrededor de 48 pesos en las góndolas de supermercados. A esto se suma que, por la crisis de tambos y fábricas locales, no se consiguen marcar alternativas fácilmente.
En relación a este tema, en declaraciones radiales a LT14, Reggiardo fue contundente y afirmó que los precios al público “son una estafa y los productores seguimos cobrando precios muy malos».