Milicianos del yihadista Estado Islámico se apoderaron por completo del yacimiento petrolífero de Yezl, al noroeste de la ciudad de Palmira, en el centro de Siria, el último que conservaba en sus manos el gobierno de Bashar al Assad
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, ONG opositora que desde Londres monitorea la situación interna en Siria a través de una amplia red de informantes sobre el terreno, el yacimiento está ahora bajo el «control total» del EI.
De esta forma, la organización avanza en una amplia zona desértica en la que en el último período las fuerzas del gobierno sirio estaban intentando recuperar terreno.
Los técnicos que trabajaban en la refinería alcanzaron a huir del lugar poco antes de que las fuerzas del EI se apoderaran del complejo petrolero, según declaró durante una entrevista telefónica con la agencia de noticias EFE el director de la ONG, Rami Abderrahman.
La toma se produjo después de intensos enfrentamientos entre el EI y las fuerzas leales al Gobierno de Damasco.
Según Abderrahman, el gobierno de Damasco cuenta ahora sólo con el crudo que le suministra el Gobierno iraní, el principal aliado del presidente Al Assad en la región.
Por otra parte, según la ONG al menos 16 miembros del EI murieron en bombardeos aéreos de la coalición internacional en la ciudad oriental siria de Al Raqa, principal enclave de la organización.
En un comunicado, destacó que los ataques fueron lanzados en el norte y oeste de ciudad y que entre los yihadistas fallecidos hay un uzbeko, un marroquí, un egipcio y un tunecino, además de otro de nacionalidad indeterminada, además de sirios.
El Estado Islámico proclamó en junio de 2014 un califato en Siria e Irak, donde ha conquistado una amplia zona del territorio de ambos países.
Fuente: Télam