El detenido pidió que «ordenen mi traslado a la Unidad Penal 1, porque he sido quemado, apuñalado y amenazado de muerte, hasta por las autoridades de la» cárcel de Federal, afirmó Celis. Dice que hace 11 días está en aislamiento.
l acusado de integrar una banda dedicada a la venta de droga, Daniel Celis, denunció a través de una carta que sufre tratos inhumanos, agresiones, quemaduras y apuñalamientos. Además, sostuvo que las autoridades judiciales y organismos de Derechos Humanos «miran para otro lado».
«Espero que al recibir la misma se encuentren bien, no contando yo con la misma suerte, dado que desde el día jueves 13, me encuentro alojado en una celda de aislamiento, un exbaño de la Unidad Penal N° 8» de Federal, indica Daniel Celis, en el comienzo de una carta enviada a Radio La Voz.
Huelga de hambre
«Por eso, me he declarado en huelga de hambre por tiempo indeterminado, al no tener respuesta alguna por parte de las autoridades judiciales, provinciales o federales, dado que he agotado las instancias con recursos», agrega Celis.
Celis también señala que «al estar a 200 km de Paraná, no contamos para el traslado de mis familiares. Además, se agrava mi situación porque mi esposa María Fernanda Orundes Ayala está detenida, lo mismo que otros integrantes de mi familia, a quienes no veo desde diciembre del año pasado, en mi último acercamiento familiar. Hace un año y un mes estoy alojado en esta unidad penal, donde he padecido todo tipo de cosas», añade Celis.
Constantes requisas
«La población carcelaria no quiere convivir conmigo, por las constantes requisas a las que soy sometido. Por eso, quiero hacer pública esta situación en su medio de comunicación tan escuchado», agrega el detenido.
«Pido la intervención de la Dirección de Derechos Humanos, de las autoridades judiciales, que dejen de mirar para otro lado, y ordenen mi traslado a la Unidad Penal 1, porque es de su conocimiento que he sido quemado, apuñalado y amenazado de muerte, hasta por las autoridades de la Unidad penal».
«Espero urgente una respuesta», concluye el escrito enviado a LaVoz.