Juan Pablo Ledesma continuará detenido por el asesinato de su ex pareja, sus dos hijas y la actual pareja de la mujer. De confirmarse la responsabilidad en juicio, podría ser condenado a prisión perpetua.
La Justicia de Concepción del Uruguay dispuso este viernes, en audiencia desarrollada en la Sala Penal, ante la jueza de Garantías, Alejandra Herrero, la prisión preventiva de Juan Pablo Ledesma (29), acusado del cuádruple homicidio agravado por femicidio, ocurrido el lunes pasado por la madrugada en el Barrio 134 Viviendas de esa ciudad.
La medida quedó impuesta por el plazo que dure toda la Instrucción Penal Preparatoria (IPP), por lo que el asesino deberá ir a la cárcel, una vez que le den el alta del hospital Urquiza, donde permanece internado por las lesiones que presentaba en su cuerpo.
Como se recordará, Ledesma está acusado de matar a puñaladas a Johana Antonela Carranza, las niñas de ambos Luciana, de 5 años, y Candela, de 7 y Carlos Peralta, pareja actual de la mujer, con la intención de causar sufrimiento a su ex mujer.
En la audiencia estuvieron presentes la fiscal Melisa Ríos y la defensora Oficial, Romina Pino, contándose con la presencia de público, entre este, alumnos de la UCU, familiares de las víctimas fatales y personal judicial; en Sala no estuvo el imputado porque continua internado con custodia policial.
Alegato de la parte acusadora
Quien hizo uso de la palabra en primer lugar fue la fiscal Ríos, quien contó cómo se sucedieron los hechos ese día, señalando que Ledesma regresó a Concepción del Uruguay con sus hijas, en un micro procedente de Basavilbaso, donde estaba viviendo, ya que las niñas habían ido a pasar el fin de semana.
Una vez en Concepción, abordó el remis interno 51 de la empresa Del Valle en la esquina de San Martín y Araoz, guiado por el chofer de apellido Carbajal, con el que fue al Barrio 134 Viviendas pese a la orden de no acercamiento librada en agosto de este año por el juez Andrés Torres, donde llamó a la puerta y fue atendido por Johana; mientras bajaba a las niñas le pidió al remisero que lo esperara.
Ledesma le propinó una trompada a Johana y accedió a la vivienda. Momentos después fue a buscar a las niñas que habían salido gritando y llorando «papi no, papi no», mientras la mujer le gritaba «con las nenas no». La situación fue vista por el remisero y un vecino lindante, quien escuchó que pedían llamaran a una ambulancia.
El hombre encerró a todos en el domicilio y trabó la puerta por dentro, donde terminó su salvaje cometido, dando muerte a sus hijas en una de las habitaciones y a su ex esposa en la cocina-comedor, junto a Peralta.
Por el accionar, la fiscal le imputa los delitos de «Doble homicidio agravado por el vínculo», en el caso de las hijas; «Homicidio agravado por el vínculo y la violencia de género» (femicidio) en el caso de la esposa, y «Homicidio agravado por violencia transversal», en el caso de Peralta.