El director de Epidemiología de la provincia, Diego Garcilazo, evaluó la situación de la provincia en el marco de la segunda ola de contagios de coronavirus y valoró que, al menos en Paraná, se ve un mayor acatamiento a las restricciones de circulación para evitar la propagación de casos.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Garcilazo explicó que “los informes de los partes diarios tienen que ver con los casos que se notifican cada día, pero lo que más interesa evaluar es el momento en que la persona se enfermó que se saca con la fecha de inicio de los síntomas”.
“Cuando se evalúan los indicadores y se hace la curva epidemiológica se toma de acuerdo a cuándo las personas se fueron enfermando y no cuando se notificaron. Por eso se puede ver un día 1.800 casos y al siguiente 700, pero esos casos fueron ocurriendo en distintos días de la semana, por eso mucho más claro ir siguiendo la curva epidémica y no los casos que se notifican por día. De todos modos, claramente el número de casos que se va notificando representa lo que pasó la semana anterior y estamos en un promedio de casos muy alto”, explicitó.
En cuanto a los contagios en Concordia, dijo que “junto con Paraná son grandes aglomerados y aportan muchísimos casos a la provincia en general, por la cantidad de población que tienen, y la semana pasada aportó más casos que Paraná”.
De todos modos, admitió: “Sabíamos que esta semana seguiría siendo complicada porque los casos que vemos hoy son los de personas que se enfermaron la semana pasada y los que se enfermaron la semana pasada en general se contagiaron la semana anterior, con lo cual el impacto de las medidas de restricción se esperan ver a fin de esta semana o la semana que viene”.
Evaluó asimismo que “el año pasado la pandemia tuvo otra particularidad a nivel nacional y provincial porque los casos se producían en una localidad que derramaba contagios hacia otras cercanas; cuando comenzó en el AMBA pasó un tiempo hasta que las provincias comenzaron a tener circulación comunitaria y del mismo modo pasó en la provincia. En un momento hubo muchos casos en Paraná y cuando hubo muchos en Concordia ya en Paraná habían bajado. La diferencia es que este año ya había circulación comunitaria en todo el país y esta segunda ola alcanza a todas las provincias, a todo el AMBA y a todas las localidades al mismo tiempo con un aumento importantísimo de casos, y eso genera muchísima tensión no sólo al sistema de salud son también a los recursos”. “En este momento todas las provincias y todas las localidades requieren de los mismos recursos al mismo tiempo y eso es una gran dificultad”, resumió.
Consultado por la ocupación de camas, el funcionario indicó que “esto no se evalúa solo por la cantidad de camas y respiradores sino también por el personal que puede manejar una cama de terapia. Y hoy la dificultad más grande es por el personal capacitado para estar en una terapia porque no es algo que se pueda duplicar tan fácilmente porque no se compra en cualquier lado, y además esta demanda que hay en todo el país –principalmente de oxígeno y de narco sedación- hace que las compras queden desiertas y eso genera una complejidad muy grande”.
“Hasta ahora no hubo faltas pero estamos en el límite y eso es lo que más preocupa, más allá del número de camas en sí porque las camas son fáciles de comprar o de obtener, recursos económicos no faltan, pero hay otra cuestión que no se puede comprar que es el recurso humano. Esto no es un problema económico o de falta de compra de cosas sino que tiene que ver con otras situaciones, que hay una muy alta demanda de todos estos recursos que tienen un límite”, señaló.
En ese contexto, reiteró que “todas las camas que se pueden utilizar en algunos establecimientos están al 100%, en otros quedan algunos lugares, pero básicamente hay una rotación constante y cama que se desocupa, cama que se ocupa automáticamente”.
Consultado por el comportamiento de la ciudadanía ante esta realidad, Garcilazo marcó que “antes de evaluar los indicadores, se habla con todos los directores de los hospitales y establecimiento para ver si aumenta la consulta de la enfermedad respiratoria y la ocupación de camas, porque cuando aumenta muy rápido la consulta respiratoria, generalmente a los pocos días eso se traduce en un aumento del número de casos”.
En cuanto a su visión personal, reconoció que “en Paraná esta vez veo mucho acatamiento de las restricciones, especialmente a la noche, hay muchos controles y es como que la gente ha entendido cual es la situación. También los medios han acompañado mucho, han sido transparentes y precisos al transmitir la información y eso ayuda a que la gente tenga idea de cuál es la situación sanitaria y colabore a disminuir la transmisión”.
“Mi impresión personal es que en los últimos 15 días la gente se está cuidando un poco más porque esto nos da algo de tranquilidad aunque queremos que esto impacte en los números también. Sabíamos que esta semana iba a ser durísima, igual a la que pasó, pero esperamos empezar a ver la semana que viene un efecto en los números concretos”, concluyó.