Las fuerzas de seguridad trabajaban arduamente para recapturar a los criminales que escaparon de la prisión de Goiana, cerca de Brasilia. Según medios locales, uno de los reclusos asesinados fue decapitado.
Unos nueve presos murieron (uno de ellos fue decapitado) y 14 resultaron heridos al iniciarse este lunes, una rebelión de presos rivales en un ala de una cárcel en la Región Metropolitana de Goiás, Brasil, informó la Superintendencia Ejecutiva de Administración Penitenciaria (Seap) de ese país.
No obstante, el canal de televisión brasileño GloboNews reportó 13 víctimas fatales.
Pese a que la Policía Militar no supo informar cuántos presos lograron huir durante la rebelión, el comandante de la policía de Goiás, aseguró que cerca de 20 internos fueron recapturados esta tarde.
Los presos heridos fueron trasladados al hospital de urgencias de Goiana, mientras que las llamas que emanaban de los colchones incendiados fueron rápidamente disipadas por el cuerpo de bomberos.
El motín fue controlado por Agentes del Grupo de Operaciones Penitenciarias Especiales (GOPE) y del Batallón de Choque de la Policía Militares.
La operación contó con un helicóptero que monitoreaba los alrededores de la unidad para buscar eventuales fugitivos. Los familiares de los presos se dirigieron a la puerta de la cárcel en busca de información.
Un informe divulgado en 2016 por el Tribunal de Justicia de Goiás alertaba para «inminente riesgo de nueva rebelión» en la Colonia Agroindustrial.
Según el documento, titulado «Informe de inseguridad a las cárceles de Goiás», la unidad tiene capacidad para 122 presos del régimen semiabierto.
Durante una visita realizada en marzo de 2015, después de un incendio en el lugar en 2014, la cárcel albergaba a 330 detenidos.