José María Luján, Asesor del ENHOSA (Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento) visitó Gualeguay el viernes para llevar tranquilidad a los vecinos sobre el estado del agua potable. Junto al intendente Luis Erro, que le pidió especialmente que viniera, evaluó el estado de la red de agua local y coincidió con la sugerencia del Foro Ambiental: hay que avanzar hacia un sistema mixto de extracción
“Primero le agradezco que viniera aunque ya ha venido en otras oportunidades ´´ arrancó el jefe comunal, “porque el objetivo es que nos asesora en la parte técnica y llevarle tranquilidad a la gente”. A la hora de hablar de la situación de Gualeguay, Luján apuntó que “el sistema de Gualeguay lo conozco muy bien. La solución definitiva para el abastecimiento de agua potable es en las fuentes de agua superficiales. En Entre Ríos hay más de 5.000 cursos de agua y es lo más aconsejable. Por supuesto que una planta potabilizadora lleva tiempo e inversión, mucho más que las perforaciones”.
El asesor explicó que “hacer pozos para seguir extrayendo agua es un paliativo, algo temporario, que es útil para el corto plazo, para ciertos períodos o zonas altas por ejemplo. Ahí sí una perforación te saca del paso pero no debe ser algo definitivo. Cuando uno utiliza como única fuente el agua subterránea como en Gualeguay, si un pozo que estaba previsto para funcionar 8 horas por día se lo exige ya no solamente en verano sino también en invierno, disminuye su vida útil. Las perforaciones se van debilitando y eso impacta en la calidad del agua que se extrae. En Gualeguay, como en todos lados del país, los números de algunas perforaciones empiezan a modificarse. Yo he estado en contacto con los pedidos que ha hecho el intendente están bien. Se pide la perforación de cuatro pozos más, y aparte la colocación de otro encamisado en dos pozos viejos. Cuando el encamisado se deteriora, provoca que el agua se mezcle y se vea afectada su calidad.”.
La pregunta del millón es si el agua de Gualeguay se puede beber con tranquilidad. “Los valores de los análisis que me aportó la municipalidad son razonables. En uno o dos pozos hay parámetros que para la OMS (Organización Mundial de la Salud) aceptables. La OMS tiene valores ´guía’ que publica cada cuatro años. De todas manera son valores guías, recomendados como digo, después cada país debe hacer una adaptación para sus normas. Con el arsénico sucede lo mismo porque hay regiones del país que tienen altos niveles de arsénico, lejos de lo que estipula la OMS. En el caso de Gualeguay una cosa es una perforación, que puede tener un parámetro excedido, pero esa agua se mezcla en una cisterna, o en red. En el caso del nitrato, que hay algunos pozos que están sobrepasados en los valores recomendados, aclaro: para la OMS entre 50 y 100 son valores aceptables. Sí, pasando los 100 son valores no recomendados. También apunto que una persona cuando consume lechuga, acelga, zanahoria o papa, le aporta en nitrato más del 75% y el agua sólo aporta un 8%. Mucho peor si se come salame, o un pancho, donde los conservantes que llevan están hechos a base de nitratos. Si una embarazada come un salame o una ensalada, consume más nitratos”.
Para el especialista del ENHOSA la recomendación que llegó a tribunales “fue un exceso. Vuelvo a lo del arsénico como ejemplo. Para el agua mineral se admite niveles superiores a los que aconseja la OMS. Pasa que es muy mediático, porque dicen que se consume agua con arsénico. En el tema del agua potable hay que ser cuidadosos, porque es esencial para la salud. Por los valores que he visto con algunos pozos excedidos de los 50 miligramos por litro, que es lo que indica la OMS, aún así no hay ningún problema. Lo otro que sugiero es un sistema mixto donde el mayor porcentaje de abastecimiento de agua sea superficial. En esta última década se han comenzado a hacer plantas potabilizadoras de nuevo porque son obras costosas, pero deben marchar hacia eso. En Entre Ríos se hizo una en Paraná, Concepción del Uruguay y hay proyectada otra en Concordia”.
El intendente sostuvo, luego de escuchar a Luján, “que nos ha iluminado desde lo técnico y nos llena de tranquilidad a todos. Todos teníamos la misma duda sobre el nitrato pero cuando ví escrito todo me tranquilizó. O el contenido de nitratos que puede tener una ensalada”. El jefe confirmó entonces que le han pedido a la Nación 4 pozos más y dos encamisados. “La semana pasada presentamos el proyecto para la planta potabilizadora”, agregó. “Es lógico que la gente se preocupe, pero hay que ver todos los aspectos y las variables. El servicio hay que tenerlos los 365 días del año. Es algo así como la hermana pobre porque la gente suele ser lo último que paga, pero es vital”, evaluó Luján.
Controles exhaustivos
El técnico del ENHOSA recomendó ajustar los controles, sobre todo en aquellos pozos cuyos números varían demasiado. “La municipalidad ya tiene un diagrama armado y está estipulado cuántas muestras y qué controles se deben hacer. El control tiene que existir y debe ser exhaustivo, sobre todo en aquellas perforaciones más viejas o en las que cambian los parámetros muy seguidos. ¿Cuánto tardan los pozos? Estimo que antes de fin de año se podrán hacer dos o tres. Pero todo depende de los costos y los procesos legales”. Cada pozo sale entre 150 y 160.000 pesos.
