Federico Mario Antonio Bogdan, el intendente de Gualeguay, falleció hoy al mediodia en la Ciudad de Buenos Aires en la Sala de Terapia Intensiva del Hospital Italiano. Estaba allí desde el sábado pasado cuando fue trasladado desde el Hospital San Antonio. Casado, tres hijos, tenía 66 años.
El jefe comunal de Gualeguay murió hoy sábado a los 66 años en la ciudad de Buenos Aires, luego de estar casi una semana luchando por su vida. Bogdan había sido trasladado el pasado sábado desde el Hospital San Antonio en grave estado. Pese a los riesgos del traslado, que se efectuó en dos ambulancias del Hospital Italiano, llegó bien a Capital y pudo ser ingresado a la terapia del Italiano. Sin embargo, pocas horas después, el domingo, sufrió una complicación neurológica que se agravó el lunes.
El sábado 10 de octubre él mismo confirmó que había dado positivo de coronavirus. Aislado en su casa y con pocos síntomas al principio, esa misma semana su médico personal Mauricio Besimsky decidió llevarlo al hospital. Bogdan se agitaba solamente de caminar al baño. Ingresó a Clínica Médica donde quedó aislado y con asistencia de oxígeno a través de una mascarilla.
Pero los acontecimientos se precipitaron. Debió ser derivado a la Terapia Intensiva e intubado. Su estado se agravó en pocas horas, y comenzó a crecer la posibilidad del traslado. Si bien en un primer momento era complicado, lograron estabilizarlo y una leve mejoría abrió una ventana para esa alternativa que finalmente se concretó el sábado pasado. El estado del intendente no se modificó nunca. Si bien los partes dieron cuenta de alguna mejoría respiratoria a principios de semana, su estado se fue agravando hasta el desenlace final.
Mientras Bogdan peleaba por su vida, en Gualeguay la gente seguía con angustia, rezos y ruegos la agonía. Entre las muchas cadenas de oración que se armaron hubo una que llamó la atención: “Rosario por Bogdan”. Las 24 horas de los últimos días estuvo activa con miles de gualeyos que rezaban por la salud de su intendente. Miles de corazones latieron con cada rosario y con cada plegaria.
En la municipalidad el impacto de la ausencia del ‘jefe’ se hizo sentir. “La verdad estamos destruídos. Extrañamos sus bromas, su presencia. La gente anda como zombie sin saber qué hacer…”, resumió una de sus colaboradoras.
Federico Bogdan llegó a la municipalidad en diciembre del 2015. Fue electo después de vencer a la actual diputada Paola Rubattino por el PJ. En 2019 fue reelecto por una gran diferencia de votos, ganándole esta vez al actual Presidente del CGE Martín Muller.
Fue fiel al estilo que lo llevó al poder. Hombre del sector privado, apasionado de los fierros, construyó su perfil en base al trabajo en las entidades intermedias. Casi no hay ONG de Gualeguay con la que él no haya tenido que ver. Atravesado para hablar, pero siempre cercano a la gente, dador de abrazos y besos al por mayor. Era un optimista eterno.
La primera intendencia quedó atravesada por obras importantes: el camino a Puerto Ruiz, la urbanización del Barrio Defensa Costera, 150 viviendas para familias vulnerables, muchas cuadras de asfalto, cloacas, cordón cuneta, el Plan Tené Tu Casa, la cancha de jockey en la costanera, el fortalecimiento del crecimiento del carnaval con la mirada puesta en los clubes y, al final, las dos primeras cuadras del centro comercial a cielo abierto, un viejo anhelo de la ciudad. Una política social agresiva y transparente y sobre todo mucha gestión. Bogdan hizo infinidad de viajes a Buenos Aires para golpear puertas y conseguir cosas para Gualeguay. Su insistencia le valió la obtención de obras valiosas para la ciudad, algunas de las cuales todavía están pendientes, entre ellas la prometida planta potabilizadora. Gracias a todos los contactos que tenía también siguió gestionando para el hospital y otras entidades intermedias con las que siempre tuvo un lazo especial. La municipalidad está ordenada, no tiene deudas y fue capaz de formar un buen equipo de trabajo que tuvo pocos cambios pese al desgaste de la administración.
Hace unos años, El Día publicó las entrevistas a los candidatos. En la nota Bogdan marcó como defecto “saber que puedo dar más y a veces me faltan horas”. También habló de lo social y lo importante que era para él. Y de los sueños que tenía para Gualeguay. Muchos los pudo cumplir.
Nacido el 17 de junio de 1954 hoy sábado 31 de Octubre de 2020 murió para tristeza del pueblo que tanto amaba.
Jorge Barroetaveña
