La responsable del Laboratorio del Agua de la Municipalidad de Gualeguay, Silvina Vaccaro ratificó que todos los análisis que se han hecho sobre el estado de la red han sido positivos para el consumo. La funcionaria buscó llevar tranquilidad ante rumores y versiones sobre la calidad del agua y el fuerte olor a cloro que posee en algunas zonas de la ciudad.
En diálogo con El Día de Gualeguay, Vaccaro explicó que “el seguimiento viene desde antes del laboratorio. Cada seis meses el estudio químico y cada dos el bacteriológico. Ahora, con un lugar específico, desde hace un año, en el laboratorio tenemos todo el material para los estudios. Se hacen regularmente, se recorren todas las perforaciones, se toman las muestras y se hacen los estudios. Cuando arrancamos me encontré que había pozos sin canillas de muestreo, y que las condiciones no eran las ideales. Todo se ha ido mejorando, con canillas, gabinete y candado, para evitar cualquier vulnerabilidad que pueda comprometer la calidad del agua. También en todas las perforaciones se instalaron clorinadores automáticos. Esto me permite asegurar la calidad del agua que sale de la perforación y que va a ingresar a la red. Una vez que entra en la vivienda, es otra cosa porque lamentablemente hay muchas conexiones clandestinas”.
Vaccaro señaló que “los clorinadores son equipos que se han instalado por fuera de las perforaciones y son dosificadores de cloro. Van inyectando, se programan y se controlan, cloro. Es obligación clorar el agua, no se puede no hacer. Segundo, hay que cumplir un mínimo de cloro para asegurar que no haya ninguna bacteria y después tenés un máximo que no se debe superar porque puede comprometer la salud. Ni bien el agua sale de la perforación, empieza el inyectado de cloro”.
Gualeguay posee en la actualidad, incluído el pozo del 150 Viviendas, un total de 25 pozos. “Sucede que no siempre se utilizan todos a la vez, tiene que ver con la demanda, ni todas las perforaciones están las 24 horas del día prendidas. Tienen un timer y los tiempos se van combinando. Los clorinadores están en todos los pozos, dentro de la caseta. Sí es que la vivienda que está cerca de la perforación tendrá una mayor concentración de cloro que la que está más alejada. Igualmente siempre es preferible tomar una agua con gusto u olor a cloro que no lo tenga. Si hay cloro no hay bacterias. El cloro es un gas que se evapora. Si vos ponés una botella en la heladera o dejás un vaso afuera, pierde el olor en un rato. Si te tomás el vaso directamente de la canilla, sí vas a sentir olor y gusto. Al rato, va a ser mucho menor. Clorar es sumamente importante y es un gran avance con la calidad del agua. Es la forma de asegurar que no haya bacterias en la red. Incluso, ayuda a desinfectar los tachos. Por supuesto que es algo mínimo pero todo suma para mejorar la calidad del agua”.
Sobre las últimas muestras, tomadas en diciembre remarcó que “tanto el bacteriológico como el físico químico dieron bien. En todos los casos el agua que sale de las perforaciones cumple con las normativas que uno tiene que es el Código Alimentario Argentino, la OMS y el decreto de la provincia del 2012. El agua es apta para el consumo”.
En relación a la ‘turbiedad’ del agua que circuló en las redes, Vaccaro explicó que “es oxígeno en el agua. Aunque cueste creerlo cuando las cañerías se vacían se llenan de aire y es lo que hay en el vaso. No es contaminación. Si uno quiere hablar de contaminación no lo es, ni química ni física porque si lo dejás un tiempo a ese vaso, el oxígeno se va. En el 2016, cuando empezamos los muestreos, había una perforación que siempre salía con oxígeno que es la de Paso de Alonso. Insisto, no es contaminación ni física ni química, es aire”.
Vaccaro agregó que “tenemos agua de buena calidad pero es alcalina. Eso provoca el zarro. El agua es alcalina y eso precipita y es lo que se ve en las pavas, las canillas. Pero eso no compromete a la salud. También esa alcalinidad hace también que sea sabrosa, relativamente rica. Todos los resultados está en la Dirección de Medio Ambientes y son públicos para los que los quieran ir a consultar”.
Finalmente la funcionaria dijo que entendía la preocupación de la población. “Entiendo la preocupación de la gente como a veces también hay desinformación. Cuando hablo lo hago con fundamento, con resultados, recorro las perforaciones y sé cómo están. Me ha pasado que cuando alguien me discute y me dice ‘el agua está contaminada’. Bien, ¿con qué? Que me digan con qué está contaminada. Si uno habla debe ser con fundamento. Me ha pasado con alguna que otra institución. Les digo, tomen su muestra y vayan a un laboratorio que usted quiera. Nosotros hacemos la contramuestra. Otros te dicen claro, al municipio nunca le va a dar mal y yo también tomo agua de la red. Para decir que está contaminada hay que tener pruebas. De todas maneras entiendo la preocupación de la gente”.
Vaccaro recordó que “hay muchas conexiones clandestinas que uno no las conoce y eso también compromete a la red. Es como ENERSA que llega hasta el medidor, después en el interior de la vivienda es otra cosa. Con el agua pasa lo mismo. En la perforación de la zona donde se mostró el vaso, el agua sale perfecta y lo constatamos”.
