Benjamín tenía lesiones superficiales en sus manos y rostro. Se las habrían provocado al defenderse. Al confirmarse que no fue abusado, creen que lo mataron porque impidió la vejación y porque conocía al atacante.
Corren las horas y la investigación por el crimen de Ulises Benjamín Amaya, ocurrido en la provincia de Tucumán, se inclina por una hipótesis: el niño fue asesinado porque se habría resistido a ser abusado sexualmente. Ahora, los pesquisas están trabajando para identificar al autor del aberrante hecho.
La fiscala Adriana Giannoni volvió a dirigir en el barrio Jesús de Nazareth de El Colmenar un operativo para sumar indicios que le ayuden a esclarecer el caso. Insistió con la medida porque los forenses le confirmaron que el menor tenía algunas lesiones superficiales en sus manos y rostro. Esas son heridas llamadas «defensivas», es decir, que se producen cuando una persona se resiste a ser atacada. Al confirmarse que «Benja» no fue abusado, los pesquisas creen que lo mataron porque impidió la vejación y porque conocía al atacante.
Personal de la División Homicidios, al mando de los comisarios Cristian Peralta y Diego Bernachi con los de Equipo Científico de Investigación Fiscal, estuvo en el barrio buscando a la persona que captó al menor. Los vecinos le comentaron al diario La Gaceta que los policías les mostraron una fotografía de un joven con una remera blanca, pero negaron conocerlo.
Para los especialistas, Benjamín fue captado por una persona que era conocida por el menor. «Los familiares coincidieron que el niño era muy pícaro y que no salía nunca solo de su casa. Era muy sobreprotegido por sus familiares. Tanto es así que, a pesar de tener cuatro años, seguía siendo amamantado por su madre», indicó una fuente cercana a la investigación.
Prácticamente está descartado que se trate de un familiar directo, puesto que todos estaban en la vivienda cuando el niño desapareció o se encontraban con otras personas que ratificaron dónde estaban. Ahora el análisis se centró en el ámbito vecinal con los que el pequeño tenía algún tipo de relación. «El problema es que aquí hay mucha gente que es conocida porque pasan por aquí, pero son de otro lado», dijo una vecina.
La identidad del supuesto atacante no es el único interrogante sin respuesta que tienen los investigadores. Con el correr de las horas se convencen que el homicida asesinó al menor para evitar que lo denunciara.
Pero la manera en que lo mató a «Benja» los desvela. No entienden cómo el asesino se arriesgó en buscar un cable, hacer un nudo y colgarlo en un puente en vez de ahorcarlo en medio de los matorrales. Eso, para los pesquisas no sólo llevó más tiempo, sino que podría haber sido visto por alguien. En un principio no se podría probar que al pequeño lo mataron y luego lo colgaron en el puente para que fuera encontrado.
Con este punto hay otra teoría: el asesino conocía los movimientos de la zona y decidió colgar a «Benja» para que pensaran que se trataba de un suicidio y así desviar la investigación.
El niño fue visto por última vez el jueves cerca de las 15. Fue encontrado por otros chicos dos horas después. Los investigadores tratan de encontrar un testigo que les indique qué sucedió en esas horas. La zona donde fue encontrado el cuerpo es muy transitado después de las 17, ya que es el camino que eligen recorrer los estudiantes y trabajadores que regresan a sus casas.
Milagros Amaya, mamá de Benjamín, manifestó: «Con lo que me hablaron me siento más aliviada y relajada, porque me están apoyando y porqué sé que todo va a salir bien. Me están dando una solución. Pedíamos que se investigue quién es el que cometió el hecho. Nos sentimos muy acompañados y agradecemos a la doctora Giannoni de haber participado con nosotros, porque nos han hablado muy bien de ella. Pedimos que se acerque a hablar con nosotros y lo hizo», expresó.
«Me dijeron que tengamos paciencia y que se van a concentrar en la investigación para que todo salga a la luz. Queremos que se haga justicia. Vimos que hicieron rastrillaje para ver dónde lo llevaron a Benjamín y pusieron policías para conservar el lugar, por si el sospechoso concurría por el mismo lado. Pedimos que se haga justicia y que salga todo a la luz», concluyó.