La detención de 24 policías y el secuestro de gran cantidad de material probatorio (armas, municiones, documentación y hasta drogas) desató un verdadero escándalo dentro la institución en Santa Fe. Las capturas se concretaron siguiendo directivas de la Fiscalía de Delitos Complejos, a cargo de los doctores Ezequiel Hernández y Mariela Jiménez, quienes comandan una investigación que data de varios meses.
Tras evaluar la situación los fiscales decidieron lanzar una serie de múltiples allanamientos, los que en su mayoría se concretaron en la ciudad de Santa Fe, además de Recreo y San José de Rincón. Para efectuar las requisas se contó con la colaboración de efectivos de Gendarmería Nacional, como así también personal de la sección Asuntos Internos y la División Judicial de la Unidad Regional I.
Gran parte de los procedimientos se realizaron en la base 3 del Comando Radioeléctrico, ubicado en Avenida Blas Parera y Gorostiaga. Pero también se allanó Trámites y Libertades, Orden Público, además de gran cantidad de requisas domiciliarias.
Según trascendió los policías involucrados en este delicado asunto quedaron acusados de gravísimos cargos.
Entre esas imputaciones figuran delitos tales como «abuso de arma; falsedad ideológica en instrumentos públicos; torturas, apremios ilegales, robo y robo calificado, entre otros».
Armas y drogas
Durante los procedimientos que comenzaron el lunes y se prolongaron hasta el martes, se secuestraron 6 pistolas, calibre 9 mm; 3 revólveres, calibre 32; otro revólver, calibre 38; además de un chaleco antibalas, una mira telescópica y cuatro cuchillos, entre otros elementos.
También se incautaron gran cantidad de municiones entre las que se cuentan más de un centenar de vainas servidas. Teléfonos celulares; notebooks; cámaras fotográficas y envoltorios con marihuana y cocaína.
