La Casa Rosada definió que no frenará los aumentos pautados para el primer semestre, mientras estudia postergar los programados para octubre. En este camino, el último día de marzo se conocerá el aumento de gas que el Gobierno asegura que rondará el 30 por ciento y los privados pujan para que sea mayor, porque si no se generaría un conflicto con las empresas licenciatarias de transporte y distribución.
Y a esto se le sumarán leves aumentos en el resto de los energéticos hasta diciembre, siempre y cuando no sucede una nueva devaluación como en 2018. En abril, a la par de la suba del gas, ya se comienza a perfilar otro incremento en los combustibles. El precio de las naftas y el gasoil en Argentina depende en buena medida de la cotización del petróleo en el mundo, valor que en marzo está estable en 67 dólares por barril en su variedad Brent. Pero lo que presiona es la suba del dólar y el ajuste impositivo.
El Gobierno decidió dividir en dos tramos el alza del Impuesto sobre los Combustibles Líquidos que se aplicó desde el 1° de marzo con el fin de contener el alza en los combustibles, por lo que a partir de abril la nafta aumentaría $ 0,485 por litro y el gasoil se encarecerá $ 0,282 por litro. Esto representaría una suba de 1 por ciento para la súper y 0,8 por ciento para el gasoil común en las estaciones porteñas de YPF.
Terminado abril con la suba del gas y la nafta, llegará el turno de la electricidad que aumentará 4 por ciento en mayo y agosto con el fin de recortar subsidios en la generación, que bajarán hasta 30 por ciento a fin de año.
En este cronograma, en agosto le tocaría el turno al segmento de transporte y distribución de electricidad, pero los privados especulan que el gobierno podría postergar ese ajuste hasta pasada las elecciones, algo que Cambiemos ya hizo en las legislativas de 2017. En esta misma situación podría quedar el segundo aumento de gas programado para octubre, en pleno mes electoral.
En este auge de aumentos constantes de tarifas, ayer se conoció que la provincia de Buenos Aires aumentará 33 por ciento los peajes de Aubasa (Ruta 2 y 11 y la Autopista Buenos Aires La Plata).
Así lo expuso en audiencia pública por lo que ahora solo restan los pasos administrativos. Una vez que se concrete, los peajes de las rutas pasaría de 90 a 120 pesos y de la autopista de 25 a 33 pesos.