Ingresó en la Cámara Alta entrerriana un proyecto por el cual se declara la emergencia agropecuaria en los departamentos Gualeguay, Gualeguaychú e Islas del Ibicuy.
La iniciativa fue presentada por el senador provincial, Francisco Morchio (Cambiemos-Gualeguay) y contó con el acompañamiento de Nicolás Mattiauda (Cambiemos-Gualeguaychú) y de Daniel Olano (Islas-FpV).
El proyecto, cuenta con cinco artículos y en el primero, se promueve que se declare “el estado de emergencia y/o desastre agropecuario desde el 1 de marzo de 2019 y por el término de hasta un año, conforme a la afectación de los productores ganaderos y agrícolas de los departamentos Gualeguay, Gualeguaychú e Islas del Ibicuy.”
Asimismo, se establece que los productores cuyas exportaciones se encuentren afectadas por el estado de emergencia y/o desastre agropecuario deberán presentar una declaración jurada conforme los formularios que determine el Poder Ejecutivo a fin de acreditar dicha situación. “La Declaración Jurada deberá ser avalada por una de las siguientes Entidades representativas: Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER), Sociedad Rural Argentina (SRA) Federación Agraria Argentina (FAA) y/o Federación Entrerriana de Cooperativas (FEDECO)”, se aclaró en la iniciativa.
El proyecto también contempla que la Administración Tributaria de Entre Ríos (ATER), una vez aprobada la emergencia: suspenda la percepción del impuesto sobre los Ingresos Brutos por el período determinado en el art. 1° y se establezca una condonación y no aumento del Impuesto Inmobiliario Rural y Subrural correspondiente al período determinado en el artículo 1°.
Se establece, también en el último artículo que el Poder Ejecutivo provincial gestione ante las entidades bancarias que operan en el territorio de la provincia la flexibilización de las líneas de crédito para los sujetos comprendidos en el artículo 2.
Entre los fundamentos del proyecto se señaló que el pedido de declaración de emergencia es por las inusuales lluvias que se registraron en diciembre de 2018 y enero de 2019.
En esos dos meses, se cayó un total de 521 milímetros de agua, lo que significó un aumento de 115 por ciento del promedio anual. Las precipitaciones en esos dos meses es mayor, incluso, a la registrada hace 43 años.
Esta situación, provocó daños y pérdidas a numerosos productores de estos departamentos.