«A prima facie no hay nada raro. Había ido al baño y se escuchaba el ruido del agua que caía. Pensaban que se estaba duchando, pero había tomado la determinación de quitarse la vida», explicó el jefe de la Policía de Entre Ríos.
Jesús Sánchez, el hombre que estaba acusado de asesinar brutalmente a Jésica Riquelme, fue hallado ahorcado en baño de la Alcaidía en la Jefatura de Policía de Federal, donde se encontraba detenido. El sujeto habría utilizado unas vendas de otro detenido, para ahorcarse en uno de los baños de la sede policial.
La Dirección de Asuntos Internos investiga «las circunstancias y las responsabilidades de la Policía. A prima facie no hay nada raro, fue una autodeterminación. La instrucción recién empezó, por lo que se seguirán recolectando pruebas», dijo el jefe de la Policía de Entre Ríos, Gustavo Maslein.
Precisó que los internos «habían pedido pernoctar contra las rejas de las celdas porque hacía calor. En un momento se levanta, va hacia el baño. Se escuchaba el ruido del agua que caía y (el policía a cargo) pensaba que se estaba duchando, pero había tomado la determinación de quitarse la vida. No hay nada raro de por medio», insistió el jefe de Policía en declaraciones a radio La Voz.
El caso
El pasado sábado, Jésica Riquelme de 26 años y con un embarazo de siete meses, ingresó sin signos vitales, al hospital Justo José de Urquiza de la norteña localidad entrerriana de Federal. En la guardia se constató que había muerto un rato antes, y el médico observó un severo golpe en la cabeza.
En el nosocomio, se avanzó con el parto prematuro y se logró dar a luz a través de la cesárea, a una chiquita que rápidamente, fue derivada al hospital Masvernat de Concordia para una mejor atención.
Con el primer informe médico, desde la Justicia de Federal se ordenó a la Policía buscar y demorar a la pareja de la mujer fallecida. Personal de la Jefatura localizó a Jesús Sánchez de 38 años, quien fue detenido y alojado en la Alcaidía de la Jefatura Departamental de Federal donde finalmente apareció ahorcado.