Retrocedió casi cinco puntos y afecta a 11,4 millones de personas. La indigencia, en tanto, se redujo al 4,8%
La pobreza bajó en la Argentina casi cinco puntos y se ubicó a fines de 2017 en un 25,7%. Esto significa que, si se proyecta más allá de los 31 aglomerados que releva el Indec, la población total -incluyendo a la población rural- que sufre este flagelo llega a los 11,4 millones. La indigencia, en tanto, se redujo al 4,8% y afecta a 2,1 millones de argentinos. El 39,7% de los chicos menores de 14 años son pobres.
El dato oficial difundido por el organismo estadístico del segundo semestre de 2016 indicaba que había 30,3% de pobreza. Siempre proyectado a la población total, se estimaba que eran 13,3 millones de personas. En tanto, en la indigencia estaban 6,1% de la población, o sea, 2,6 millones de personas. Esto quiere decir que, pasado un año, hay hoy 1,9 millones menos de pobres y 500.000 personas que dejaron de ser indigentes en el país.
El número de pobreza oficial se calcula haciendo con el cruce del avance de los precios de algunas canastas de productos y servicios (Alimentaria y Básica), y los ingresos. Los salarios crecieron un 27,5 % en 2017, tres puntos por encima de la inflación (24,8%).
Sin embargo, la canasta básica -con la que se calcula la línea de pobreza- subió el año pasado 26,8%, por encima de la inflación. Pero, para el propio Indec, los ingresos de los trabajadores informales -que no reciben una jubilación- estuvieron el año pasado por encima de esta variación: subieron un 31,5%. Por otro lado, según los expertos que siguen el mercado laboral, la mayor creación de empleo el año pasado estuvo en el sector no registrado.
Sin embargo, el especialista buscó algunos matices a la información oficial. “Estamos llegando a un piso estructural. No hemos estado por debajo de eso y para perforar ese piso sin burbujas de consumo se requieren procesos de inversión que generen más y mejores empleos en las pymes y en la economía social. No va a ser suficiente con que baje la inflación. Esto no está visible aún en el programa económico”, dijo Salvia, que señaló además que las actuales canastas que sirven para establecer la línea de la pobreza no tienen en cuenta el cambio de los últimos años en el gasto de los ciudadanos en servicios públicos. Justamente, el Indec está realizando este año una nueva encuesta de gastos para actualizar esas canastas.