El cuerpo normativo que comenzó a regir el sábado da más libertades para inscribir a los hijos, aunque impone límites. En Santa Fe quisieron nombrar «Yerbabrava» a un bebé, pero lo impidieron
El nuevo Código Civil y Comercial, que comenzó a regir desde el pasado sábado, trajo consigo un gran número de cambios que afectan ya la vida de las personas. Entre esas novedades, estableció modificaciones en la filiación de los hijos: a partir de ahora se admite la posibilidad de que el chico lleve el primer apellido de alguno de los padres.
Esto supone que ahora pueden decidir qué apellido usará el bebé y en caso de que sean ambos, elegir en qué orden aparecerán en el documento. Si no hay acuerdo entre los padres, se determinará por sorteo en el Registro Civil. Antes, la ley imponía usar el del papá. De esta manera, se facilita el acceso a un derecho que con el Código pasado sólo era posible obtener a través de una demanda judicial.
A tan sólo cuatro días de que se comenzó con la aplicación del nuevo cuerpo normativo, ya se anotaron con tres chicos en la Provincia de Buenos Aires, uno en la Ciudad y otro en Mendoza con el apellido de la mamá primero.
El primer caso que se hizo público es el de una madre soltera de Mendoza que decidió mantener su apellido primero en el DNI de su hijo. El lunes, primer día de aplicación del Código, en el Registro Civil de Godoy Cruz un hombre se presentó para reconocer a un nene como hijo. «Estaba la madre presente pero no llegaron a un acuerdo sobre qué apellido debía llevar primero, entonces la responsable de la oficina decidió inscribir al nene con el apellido de la mamá en primer término y segundo, el del papá», explicó a Clarín la directora del Registro Civil, Olga Videla.
Pero el nuevo Código establece algunos límites. Por ejemplo, todos los chicos de un mismo matrimonio deben llevar el apellido y la integración que se haya elegido para el primero de los hijos. Asimismo, no pueden elegirse más de tres nombres, ni anota apellidos como nombres.De igual forma, no está permitido inscribir con primeros nombres idénticos a primeros nombres de hermanos vivos. Tampoco se pueden usar nombres extravagantes, pero sí inscribir nombres aborígenes o derivados.
En la provincia de Buenos Aires, esta semana hubo 6 reconocimientos. En tres casos, el apellido del padre quedó primero. Pero en los otros tres las madres hicieron uso de la nueva reglamentación: dos chicos llevarán el apellido materno primero, y otro directamente no usará el del padre. En la Capital, tras una caso problemático, se definió que sea el apellido materno el que aparezca primero. De igual forma, las consultas fueron numerosas y en varias provincias del país.
Prohibición en Santa Fe
Una pareja de la ciudad de Villa Constitución quiso ponerle a su hijo «Yerbabrava», pero el registro civil de la provincia se lo impidió. Según dijo su titular, Gonzalo Carrillo, nombrarlo así»resultaba demasiado peyorativo para el menor y se decidió rechazarlo».
La pareja, aprovechando los cambios en el Nuevo Código Civil, intentó inscribir a su bebé con el particular nombre. «Con el tema de nombres queda a criterio del oficial público y si considera que es discriminatorio para el chico, hacen una consulta inmediata a la dirección, en este caso me llamaron y dije que no», agregó el funcionario provincial.
Si bien desde el 1 de agosto, el nuevo Código Civil y Comercial comenzó a regir, en relación a los nombres la ley entrega mayor libertad, pero en esta oportunidad la petición fue rechazada.
En relación con los nombres y su criterio de selección, la ley otorga mayor libertad a las personas para definirlo. Se reconoce la posibilidad de inscribir nombres aborígenes o derivados de voces aborígenes autóctonas.
Fuente: Infobae
