A dos días de la final, los jugadores chilenos expresaron el descontento con los medios locales, que cargan a sus futbolistas y elogian al conjunto del Tata Martino
Se espesa el aire. Algo sucede. No se trata de nervios, es una cuestión más vinculada con la rabia. Es que a pesar de estar en la final de la Copa América, el seleccionado chileno siente que no cuentan con la confianza de todos. Primero, antes de la Copa y en la primera etapa del certamen, fue la gente la que se expresó con gestos de indiferencia e impaciencia. Ahora, en la definición, son los medios de comunicación los que no terminan de apoyar al equipo y, a poco más de 48 horas de la cita más importante para Chile de los últimos 28 años, hasta se burlan de algunos futbolistas. Sienten internamente que deben hacer conocer su fastidio. Se retroalimentan de las críticas y envían mensajes para tratar de conseguir, al menos en el último capítulo, que todos los chilenos se encolumnen detrás de este grupo que conduce Jorge Sampaoli.
Hay veces que las cosas se desvían para otro lado y no ayudan. Así como nos unimos como chilenos cuando hay una catástrofe, ahora tenemos que hacer lo mismo, porque el sábado lo vamos a necesitar
«Como país y como grupo, es el momento en el que más tenemos que unirnos para lograr lo que tanto anhelamos. Hace 28 años que no jugamos una final. Hay veces que las cosas se desvían para otro lado y no ayudan. Así como nos unimos como chilenos cuando hay una catástrofe, ahora tenemos que hacer lo mismo, porque el sábado lo vamos a necesitar». Las palabras de José Rojas retumbaron en el domo en donde brindan las conferencias los jugadores chilenos. Allí, el silencio se potenció y las miradas se cruzaron. La señal era clara y concreta. Es un pedido casi desesperado por conseguir consenso. Es que, Ultimas Noticias, un matutino de esta ciudad, publicó una serie de burlas para con el marcador central que milita en la Universidad de Chile y eso despertó mucho malestar. Incluso, varios jugadores de la Roja, en sus cuentas de Twitter, apoyaron a Rojas.
La imagen del predio de Chile dice mucho. La cantidad de carabineros apostados en la zona es ampliamente superior al número de hinchas que suelen acercarse para manifestarles apoyo a los jugadores del seleccionado local. Apenas un par de banderas, algunos hinchas con carteles, alguna imagen de Arturo Vidal, pero no mucho más. Parece que haber llegado a la definición de la Copa apenas fuese un detalle para muchos. Quizá las palabras que Eugenio Mena expresó en la última atención a la prensa permitan poner en contexto qué siente el grupo de jugadores: «Más que nunca tenemos que estar unidos. Tenemos que ser sólo uno. Tendrían que apoyarnos a todos por igual. Hay veces que están de más las críticas. No siempre se da la chance de disputar una final de Copa. Queremos de una vez por todas dejar una Copa en casa».
Cada guiño parece complotar contra el desarrollo del equipo trasandino. Dentro de la concentración conocen del poderío de la Argentina, pero entendieron como desmedido la valoración de los medios locales para el equipo de Tata Martino. Como si se tratase de un imposible para Chile poder vencer a Messi y compañía. Incluso, Sampaoli es uno de los principales afectados por estas cuestiones, ya que desde antes del comienzo de la Copa se pronunció molesto por sentir, externamente, que no todos empujan hacia el mismo lado. Por eso Rojas fue directo y expresó lo mismo que sienten futbolistas como Bravo, Alexis Sánchez, Medel o el propio Vidal: «Hay que tirar toda la carne a la parrilla. Argentina viene de jugar la final del mundo, pero nosotros algo tenemos que decir porque estamos en nuestra casa. Tenemos que pasar las buenas vibras a la cancha. Nada es imposible, venga el que venga, sean los mejores o no. No cuenta la historia, es el momento que nosotros escribamos la nuestra. El sábado tenemos que sacar a relucir nuestras ganas de ser campeones».
Fuente: canchallena.com