La entrañable oveja australiana Chris, que entró en el libro Guinness de los récords mundiales por su enorme cantidad de lana, ha muerto, según anunciaron sus cuidadores y recoge la agencia AFP.
En 2015, la oveja fue descubierta en las afueras de Canberra (Australia), luchando por caminar bajo el peso de su lana, que no había sido esquilada en los últimos cinco años.
Pero un experto se encargó de ello, algo que le salvó la vida y le dio, de paso, un récord Guinness. Los más de 40 kilos de lana esquilada, con un valor de unos 413,6 dólares en la actualidad, la convirtieron en la portadora no oficial de la lana más pesada del mundo,
El Little Oak Sanctuary anunció la muerte de la icónica oveja en una publicación de Facebook. “Estamos desolados por la pérdida de esta alma dulce, sabia y amigable”, asegura la publicación.
«Chris es conocida en el mundo como la poseedora del récord por tener la lana más pesada jamás registrada», dijo el santuario, pero aclara: «Era mucho más que eso, mucho más, y lo recordaremos por todo lo que fue: alguien, no algo».
