Está imputado por la muerte de una recién nacida, hallada dentro de un lavarropas. Un examen de ADN comprobó que es el padre de la bebé. Continúa con prisión domiciliaria y podrá salir a trabajar.
Javier Weisheim, imputado por la muerte de su hija recién nacida, que fue hallada sin vida dentro de un lavarropas en su casa en calle Urdinarrain de Paraná, continuará cumpliendo la prisión domiciliaria preventiva durante 30 días más y podrá salir a trabajar. Así se determinó en una audiencia desarrollada este miércoles en los Tribunales de Paraná.
«Solicitamos la prórroga de la prisión domiciliaria, tal como ha sucedido desde el principio de la investigación, y fue autorizada por el juez de Garantías Elvio Garzón, que entiende en la causa», indicó a Canal Nueve Litoral el fiscal Franco Bongiovanni, a cargo de la investigación.
«Nosotros confiamos que en estos 30 días vamos a poder incorporar los informes que todavía restan y formalizar el pedido de elevación de la causa a juicio», agregó el fiscal.
Confirman la paternidad
Un estudio de ADN permitió confirmar que la beba fallecida es hija de Weisheim. «Ya contamos con un informe final de un cotejo de ADN a partir de las muestras extraídas a ambos padres y al cuerpo de la bebé, que arrojó como resultado una probabilidad de 99,9% de paternidad y maternidad respecto de él y ella. Hasta el momento no estaba acreditado, pero hoy ya podemos afirmar que la bebé era hija de ambos», detalló Bongiovanni.
Salida laboral
«A partir de este momento se modificó la posibilidad de salida laboral. Hace cuatro meses que está privado de su libertad, sabemos que esta privación es excepcional, en el marco de una investigación, porque todavía no ha sido condenado y entendemos la posibilidad de que él se provea de recursos para sobrevivir», expresó el fiscal.
«Él solicitó poder salir a trabajar cuatro horas. Nosotros no presentamos objeción, porque nunca hemos tenido noticia de incumplimiento de parte de él. Nosotros ya nos contactamos con el empleador, sabemos quién es, dónde será el lugar de trabajo y oficiaremos a las comisarías con jurisdicción para que hagan el control pertinente de esa salida laboral», remarcó.
El caso
La madrugada del viernes 9 de noviembre de 2018, e un departamento ubicado en calle Urdinarrain, una beba murió a poco de nacer y su madre sufrió una grave hemorragia por la que debió ser internada.
La autopsia que se practicó al bebé determinó, no solo que había nacido con vida, sino que la causa del deceso fue una hemorragia masiva por no ligar el cordón umbilical. Esto confirma que la víctima no recibió la asistencia mínima luego de nacer. Y lo que se sospecha es que Weisheim dejó que todo sucediera sin auxiliar al recién nacido ni a la madre, quien también padeció una importante pérdida de sangre.
«La primera intervención de la Policía se dio a partir del ingreso al hospital San Martín de la joven con un cuadro de paro cardiorrespiratorio y con la constatación de que acababa de vivenciar un parto», indicó en su momento Franco Bongiovanni.
«A partir de eso -continuó- se volvió al departamento y se inició la investigación de parte de la Dirección Criminalística y personal de comisaría cuarta, que tiene jurisdicción en el lugar. En base a esa inspección se halló el cuerpo sin vida de un bebe recién nacido, de una edad gestacional de entre 33 y 34 semanas, por lo cual se detuvo al joven, con la imputación que se hizo el viernes por la tarde». La imputación, según se informó desde la Justicia, fue por el delito de homicidio calificado por el vínculo, que tiene una pena de prisión perpetua.
